Los operadores de oro están más que alcistas después de que el titular de la Reserva Federal, Ben S. Bernanke, dio señales de que los estímulos récord iban a continuar hasta que mejorase la economía.
Doce analistas relevados por Bloomberg esperan que los precios suban la semana próxima, nueve son bajistas, y ocho, neutrales, lo que constituye la proporción más elevada de alcistas que hubo desde el 26 de abril. Los precios subieron un 58% desde 2008 mientras la Fed encabezaba las compras de deuda de los bancos centrales.
El lingote de oro está listo para la primera ganancia semanal que tendrá en tres septenas y la empresa de operatoria e inversión Degussa Goldhandel GmbH dijo que la demanda de este mes iba a duplicar el promedio del primer trimestre.
Este año, los inversores vendieron 463,4 toneladas métricas valuadas en US$20.800 millones provenientes de productos de operatoria bursátil, a pesar de que algunos le habían perdido confianza al oro como recurso de conservación de la riqueza en medio de la mejora que experimentaba la economía de Estados Unidos y el repunte de las acciones. Si demasiado pronto se elevan las tasas de interés crecientes o restringen las compras de bonos, se haría peligrar la recuperación, dijo Bernanke el 22 de mayo. Pese a que los precios entraron en un mercado bajista el mes pasado y que los fondos de alto riesgo hacen la mayor apuesta de todos los tiempos contra el metal, la caída impulsa la compra de joyas y monedas.
"El oro tendría que tener demanda de divisa alternativa", dijo Daniel Briesemann, analista de artículos básicos de Commerzbank AG, Frankfurt. "La expansión monetaria de los bancos centrales debería llevar a la depreciación en las tasas de las divisas principales y al final también debería llevar a que hubiera inquietud por la inflación, aunque por el momento este no es un problema. Siempre que los inversores institucionales vendan tenencias de oro ETP (producto operado en bolsa), probablemente se equilibre la robusta demanda minorista".
Demanda física
Esta semana, el metal, que llegó a la mínima bienal de US$1.321,95 el 16 de abril, ganó un 2,5%. Las compras superaron a las ventas en nueve a uno después de que los precios comenzaran a caer hacia mediados de abril, contra el cuatro a uno que hubo durante el primer trimestre, dijo Wolfgang Wrzesniok-Rossbach, máximo responsable ejecutivo de Degussa. Este mes las ventas serán cerca del doble del promedio del primer trimestre, dijo desde Fráncfort.
El mes pasado, la casa de moneda de Estados Unidos vendió 209.500 onzas de monedas, contra las 62.000 onzas de marzo, según muestra su sitio web. Hasta el momento, las ventas sumaron un total de 52.000 onzas. Los bancos centrales también pueden contribuir a impulsar la demanda de oro mientras expanden las reservas. Las naciones que van desde Brasil hasta Rusia sumaron 534,6 toneladas el año pasado, que es el máximo desde 1964 y este año podrían comprar desde 450 hasta 550 toneladas, según informa el Consejo Mundial del Oro que está en Londres.
La emisión de moneda sin precedentes que hacen los bancos centrales contribuyó a que las acciones de Estados Unidos llegaran a sus récords, pese a que fracasaron en estimular la inflación. Las expectativas de aumento en los precios al consumidor, según mide la tasa de equilibrio de los títulos valores a 10 años del Tesoro protegidos contra la inflación (TIPS), cayó un 8,4% este año y llegó así a la mínima en nueve meses el 17 de mayo.