El miércoles la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (Sbif), publicó la información relativa a las acreencias bancarias afectas a caducidad.
Lo que en términos simples se traduce en que según la institución hay cerca de $28 mil millones (US$16,7 millones) en acreencias bancarias que no han sido cobradas por los clientes en los dos últimos años, cuyos principales motivos se refieren a fallecimientos del cliente sin información a los herederos, intereses por depósitos a plazo fijo, vale vistas no cobrados y montos que quedan tras el cierre de una cuenta corriente.
Según explicó el asesor judicial de la Sbif a La Tercera, Martín de la Vega, "las acreencias son platas que las personas dejan sin cobrar en los bancos por diferentes motivos". Cada año las entidades bancarias realizan una lista con los dineros que no han sido retirados que exceden de 1 UF, los que se publican parcialmente en el Diario Oficial, si es que son mayores a 5 UF.
Es por esto que se dispuso de un sitio web para que las personas se informen sobre si hay sumas que les corresponden, que no han sido retiradas.
Según confirmó el organismo a La Tercera, en su primer día de funcionamiento, el sitio recibió 250 mil visitas, mientras en la jornada de ayer, la cifra aumentó a unas 760 mil, colapsando a momentos el portal.
¿COMO COBRAR?
En primer lugar, quien quiera averiguar debe entrar al sitio www.clientebancario.cl e ingresar su nombre con uno o dos apellidos en el buscador. Si es que el cliente tiene una acreencia no cobrada, debe dirigirse a la institución bancaria donde mantenga la cuenta para que se le efectúe el pago.
Para esto deberá llevar el documento original que corresponda a la acreencia, si es que el trámite para obtener el producto se hizo en persona, y su cédula de identidad. En el caso de que se haya realizado vía electrónica, basta con su identificación.
En el caso de que la persona no tenga el documento original, deberá hacer una gestión judicial para que se dicte una sentencia judicial que reemplace al documento, para que el banco haga el pago.
Los clientes tienen un plazo de tres años desde que se realizó la lista para hacer el cobro, después de esto, los montos pasarán a arcas fiscales, es decir cinco años desde que el monto está disponible en el banco.
