El grupo yihadista del Estado Islámico infunde terror a través de los videos en los que muestra las decapitaciones de los rehenes occidentales, a quienes además utiliza como moneda de canje, para que los familiares o los gobiernos de los países de origen de los secuestrados depositen enormes cantidades de dinero para lograr su liberación.
Loas decapitaciones de los periodistas estadounidenses James Foley y Steven Sotloff, además del cooperante británico David Haines, fueron difundidas por el EI a través de video como advertencia a EEUU (y a los países que le cooperan), para frenara los bombardeos en territorio iraquí.
De acuerdo CNN México hay al menos dos italianas, un danés, un japonés, además del británico Alan Henning -que apareció amenazado de muerte en el video de la decapitación de Haines- que estarían bajo las garras del EI.
Por su parte, The Mirror estima que los yihadistas tendrían retenidos al menos a 24 occidentales, sin embargo revela en base a qué sustenta la cifra.
Ambos medios coinciden en que es difícil calcular a ciencia cierta qué cantidad de rehenes occidentales posee el EI, ya que las identidades de los secuestrados así como la nacionalidad se mantiene en reserva para asegurar su integridad.
Es por eso que al momento de ser liberados o asesinados causa sorpresa saber el largo tiempo que estuvieron en cautiverio. Por ejemplo, James Foley fue capturado en noviembre de 2012, Sotloff en agosto de 2013 y Haines en marzo de 2013.
El mantener bajo anonimato esta información ayuda a evitar que los rehenes se conviertan en moneda de cambio. El Estado Islámico a menudo pide grandes cantidades de dinero a cambio de la liberación de sus secuestrados, convirtiéndose en una de sus fuentes de ingresos.
EEUU y Reino Unido se niegan a pagar por la liberación de sus ciudadanos, sin embargo Francia, España e Italia pagaron rescates para liberar a sus rehenes, desembolsando un estimado de 73 millones de dólares.
Es más, un italiano secuestrado el mismo día que David Haines, fue liberado tres días después luego que fuera depositado el dinero para su liberación.
La madre del periodista estadounidense James Foley denunció la semana pasada que se sentía como una molestia para el gobierno de Barack Obama y que la amenazaron con denunciar los esfuerzos de la familia para recaudar el dinero, para liberar al reportero.
Además de los retenido de origen occidental, el EI tendría secuestrados a varios británicos que, arrepentidos de la decisión de sumarse a sus filas, intentaron volver a sus hogares, se acuerdo a The Mirror.