Trolls, trolls, trolls, trolls. Los clásicos juguetes, creados por primera vez en Dinamarca en 1959, han tenido múltiples vidas. Las figuritas, caracterizadas por su peinado vertical y colorido, han vivido prolongadas épocas alejados de la popularidad internacional -aunque gozando de un éxito permanente en su país de origen-, para luego renacer en ventas con nuevas generaciones. Pero la última vez que vivieron años dorados fue en los 90, para luego quedar relegados a objeto retro de culto.
Pero en el Hollywood de hoy, todo encuentra nueva vida, y los Trolls encontraron aliados poderosos para su renacer fílmico en el Siglo XXI, con los estudios Dreamworks (Shrek, Cómo entrenar a tu dragón) a cargo de su primera película -que se estrena hoy en Chile- y con Justin Timberlake como su principal rostro.
El cantante no sólo presta su voz a uno de los personajes, sino que también compuso el tema principal de la cinta, Can't stop the feeling, que lideró los rankings musicales en 17 países, y se ha encargado de promocionar durante meses la cinta, desde el festival de Cannes en mayo hasta un concurso para asistir junto a él a la premiere de la cinta en Los Angeles.
La historia sigue a Poppy (Anna Kendrick) una optimista troll que debe pedir la ayuda del paranoico Branch (Timberlake) cuando un grupo de sus compañeros es capturado por unas criaturas que los buscan para comérselos. Contada como musical, la película tiene temas originales interpretados por los mismos Timberlake y Kendrick, además de Gwen Stefani y Ariana Grande entre otros, e incluye covers de conocidas canciones como True colors de Cyndi Lauper, Hello de Lionel Richie y The sound of silence de Simon & Garfunkel.
La críticas iniciales a la película, que se estrena en Estados Unidos una semana después de Chile, han estado divididas. Medios como el portal Variety la aclamaron, afirmando: "El mensaje de la película, que es encantador, es que todos tenemos un pedazo de felicidad colorida y de peinado raro dentro. Y Trolls te pondrá en contacto con el tuyo". Mucho menos entusiasta fue The Hollywood Reporter, que en su reseña aseguró: "Si ponemos Shrek, Happy Feet y Los pitufos en una juguera, y los mezclas varias veces, te quedará una aproximación bastante cercana a Trolls. Todo ya lo hemos visto".