William Hague, El ministro británico de Asuntos Exteriores, llegó hoy a Somalia como parte de un esfuerzo diplomático para lograr la estabilidad de ese país, que centrará una conferencia internacional convocada para el día 23 en Londres.

El jefe de cartera llegó a la capital, Mogadiscio, en medio de fuertes medidas de seguridad, según fuentes oficiales, que han indicado que se trata de la primera visita a Somalia de un titular de Asuntos Exteriores del Reino Unido desde hace dos décadas.

El ministro se reunió con el presidente somalí, Sheikh Sharif Sheikh Ahmed, a quien comunicó que Matt Baugh será el embajador británico en el país, el primero que designa el Reino Unido desde el conflicto civil en Somalia de 1991, y le manifestó también la intención de abrir Embajada una vez que la seguridad lo permita.

Por el momento, el nuevo embajador trabajará desde la Alta Comisaría Británica en Nairobi.

Ante la inestable situación en Somalia, el viaje de Hague desde el aeropuerto de la ciudad hasta el palacio presidencial debió hacerse en un coche blindado, acompañado por otros vehículos.

La presencia de Hague en Somalia coincide con los esfuerzos internacionales para mejorar la situación del país, donde opera, especialmente en el sur, el grupo radical islámico Al Shabaab.

El Reino Unido ha convocado para el próximo día 23 en Londres una conferencia internacional sobre Somalia, a la que asistirán representantes de más de cuarenta países, además de Naciones Unidas, la Unión Africana y la Unión Europea (UE).

En declaraciones a los medios británicos, Hague dijo que la lucha antiterrorista, los problemas de la piratería y la situación humanitaria en Somalia estarán en la agenda de la conferencia. "Interesa que Somalia sea un lugar estable para la seguridad del Reino Unido", dijo.

La Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM), formada por unos 10.000 efectivos, consiguió el año pasado retirar al grupo al Shabaab de la capital.