El Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo hoy en su último programa semanal de radio que fue un gran placer gobernar el país sudamericano.
"Rompí un tabú porque todo mundo decía que era difícil gobernar Brasil. Yo no lo creo, no lo encontré nada complicado, es más, creo que fue extremadamente agradable. Probar que es posible hacer las cosas, hacer que el pueblo participe", afirmó Lula.
El gobernante aseguró que va a continuar trabajando hasta el último día de su gobierno, porque ese fue su "compromiso con el pueblo", antes de traspasar el poder a la presidenta electa, Dilma Rousseff, el próximo 1 de enero.
Lula volvió a pedir apoyo para Rousseff y concluyó recomendando a su sucesora que continúe su participación en el programa de radio, que él ha emitido regularmente cada lunes por la mañana en la emisora pública.