"Estoy angustiada, pero van a salir bien. Tenemos mucha fe", dice Jessica Navarrete, quien se encuentra en el Hospital Calvo Mackenna siguiendo de cerca la operación a la que son sometidas sus hijas María José y María Paz Paredes, las siamesas que nacieron el 3 de febrero en Villarrica y que comparten el hígado, el tracto digestivo y una pierna.
Navarrete dijo que su marido y sus hijos, que se encuentran en Loncoche, se comunican constantemente con ella para saber del estado de las menores.
La cirugía comenzó pasadas las 9 horas a cargo de un equipo de ocho cirujanos especialistas en diferentes áreas. Una hora antes ingresaron a pabellón, donde fueron sometidas a un proceso de anestesia, que estuvo a cargo de seis profesionales del área.
El objetivo de la intervención es separar una de las piernas que comparten y colocar bajo la piel unos expansores que permitan que ésta se amplíe y crezca para cubrir el defecto del abdomen y el tórax en una futura operación de separación definitiva.