El hallazgo científico podría ser clave para entender por qué se producen gemelos, a pesar de que estos bebés son usualmente más pequeños, más vulnerables a las enfermedades y a la desnutrición.

A lo anterior, se puede agregar que las madres tienen más complicaciones a la hora del parto. La pregunta que se impone, entonces, es, ¿por qué la producción de mellizos es un rasgo evolutivo?

Un nuevo estudio llevado a cabo en Gambia indica que las mujeres que tienen mellizos también tienden a tener bebés únicos que son más pesados que el promedio al momento de nacer, lo que les da más probabilidades de sobrevivir.

Los datos en que se basa el estudio habían venido siendo recolectados desde los años 50, a través del Consejo Británico de Investigación Médica.

Justo lo que necesitaba el experto en biología evolutiva de la Universidad de Sheffield, en el Reino Unido, Ian Rickard, quien vio en estos datos una oportunidad para conocer no sólo el peso al nacer de unos 1.900 bebés, nacidos de unas 700 madres, sino también el número de mellizos.

Dos hechos le llamaron la atención a Rickard. Primero, que los hijos únicos que nacían de madre que habían tenido mellizos pesaban 226 gramos más -en promedio- que los hijos únicos de madres no multíparas.

Esto no es tanto motivo de sorpresa ya que el embarazo múltiple aumenta el flujo sangúineo al útero y lo prepara para hijos posteriores, permitiéndoles recibir más fácilmente los nutrientes.

Lo verderamente sorprendente fue el segundo hecho: que en el caso de madres multiparas que habían tenido hijos únicos antes que los mellizos, aquellos también pesaban unos 134 gramos más que el promedio.

Equilibrio natural

Lo que sugieren ambos hallazgos es que las desventajas de tener mellizos se recuperan cuando una madre da a luz a hijos únicos, los que tienden a ser más grandes y saludables -como promedio- que los niños nacidos de madres que no son multíparas.

Rickard y sus colegas argumentan que una proteína llamada IGF-1 podría subyacer a los beneficios de concebir mellizos. La proteína, que circula en la sangre, puede llevar a los ovarios a segregar mútiples óvulos, con lo que aumentan las posibilidades de parto múltiple.

La proteína también determina el tamaño del feto durante el desarrollo.

La corresponsal de salud de la BBC, Jennifer Carpenter, afirma que, en todo el mundo sólo 13 de cada 1.000 bebés tienen un hermano mellizo, aunque esta tasa es mayor en los países en desarrollo.

El informe aparece en la revista Biology Letters.