Después de dar la impresión de que apoyaría a Newt Gingrich entre los aspirantes a la candidatura presidencial republicana, el magnate inmobiliario y de la publicidad Donald Trump finalmente oficializó hoy su respaldo a Mitt Romney.
Trump ha desempeñado un papel prominente en la puja republicana desde hace varios meses, cuando comentó públicamente la posibilidad de sumarse a la contienda. Sus críticas al Presidente Barack Obama y sus advertencias sobre un país en declinación encontraron eco en los activistas del movimiento conservador Tea Party.
Además resucitó las afirmaciones falsas de que Obama no hubiese nacido en Estados Unidos. La campaña de Gingrich estaba muy confiada en que recibiría el apoyo de Trump, pero hoy, el mismo Gingrich dijo que ya no esperaba el respaldo de Trump.
Trump es notoriamente impredecible y una atmósfera circense rodeó el anuncio, aunque es improbable que tenga demasiado efecto más allá del golpe publicitario.
En abril, Trump había comentado que no le entusiasmaba la candidatura de Romney en una entrevista con CNN.
Sin embargo, el magnate y celebridad de la televisión dijo el jueves a la prensa que había tomado la decisión después de reunirse con Romney varias veces en los últimos meses. También citó el desempeño del aspirante en los debates y su posición enérgica frente a China.
Romney, un millonario ex gobernador de Massachusetts, encabeza la nómina de aspirantes republicanos después de aplastar a Gingrich en las elecciones primarias de la Florida el martes.
El apoyo del acaudalado Trump podría concitar mayor atención sobre la fortuna de Romney, un día después que este dijo en una entrevista con CNN: "No me preocupan los más pobres. Allí tenemos una red de seguridad. Si necesita reparación, la arreglaré. No me preocupan los más ricos. Les está yendo bien. Me preocupa el mismo corazón de Estados Unidos, el 90-95 por ciento que se está debatiendo".
Políticos de ambos partidos aludieron a las declaraciones como un nuevo indicio de que la gran fortuna de Romney, calculada en 250 millones de dólares, lo ha insensibilizado a la vida de los estadounidenses comunes y corrientes.