Corte de cintas y largas filas en las afueras del centro comercial, marcaron las horas previas a la apertura de la primera tienda del Mall de Castro.
Debido a la aglomeración, se debió adelantar la apertura del supermercado Express de Líder, que originalmente estaba prevista para las 14 horas.
Según detallaron desde Pasmar, grupo controlador del centro comercial, la inauguración del supermercado constituye un primer hito en un proceso gradual de apertura del mall. Si bien se trata de fechas estimativas, la idea es que de aquí a agosto esté plenamente operativo.
El gerente corporativo de Pasmar, Lorenzo Miranda, destacó que el supermercado entregará más de 100 empleos directos, la gran mayoría proveniente de la misma isla. Una cifra que podría llegar a 700 puestos una vez que el centro comercial Paseo Chiloé termine su proceso de apertura.
"La historia de Paseo Chiloé tiene otro ángulo que los castreños comenzarán a conocer muy pronto. De partida, este centro comercial tiene muy poco que ver con el mito que se ha levantado respecto del tamaño: en metros cuadrados, es alrededor de una décima parte de los grandes centros comerciales de Santiago y cerca de un cuarto de Paseo Costanera de Puerto Montt. Por eso, sabemos que hoy en que Paseo Chiloé ha abierto sus puertas, veremos a muchas personas extrañadas al ver desde dentro que este centro comercial es más pequeño de lo que imaginaban", aseveró el ejecutivo de Pasmar.
La apertura de la tienda ocurre luego que en octubre de 2014 el grupo Pasmar recibiera la recepción final de la obra, que tiene cinco pisos y 29 mil metros cuadrados. El mall tendrá salas de cine, gimnasio, cafeterías, patio de comidas, tiendas outdoor y de retail.
La construcción del Mall de Castro estuvo en medio de la polémica luego que la Unesco propusiera en 2013 la demolición de los pisos superiores del centro comercial, para mitigar el impacto visual de la construcción en la iglesia San Francisco, que forma parte del patrimonio de la humanidad.
Junto con el impacto visual acusado por la Unesco, otro de los reparos a la obra fue manifestado por la Cámara de Comercio detallista de la zona, que planteó sus dudas sobre el impacto vial de la construcción.