Un golazo de Wayne Rooney a los 24' definió el primer duelo entre Chelsea y Manchester United, por los cuartos de final de la Liga de Campeones. Una llave que cumplió con las expectivas de ser el choque más cerrado de esta fase, ya que frente a las goleadas que se registraron en los otros encuentros, el choque entre los ingleses es el único que mantiene la duda sobre el clasificado a semifinales.
En lo que falló el encuentro que se disputó en el Stamford Bridge fue en el nivel del juego, donde se impuso más la disputa física y las imprecisiones, que el toque fluido y las opciones de gol.
Pero en ese escenario, fueron los "Diablos Rojos" los que se vieron mejor cuando tuvieron el control. Así llegó el gol, con un gran desborde Giggs y un centro atrás que Rooney definió con clase.
Después ambos equipos exageraron con los centros y remates de distancia, pero era el Chelsea el que mostraba más problemas para generar peligro. La más clara fue un cabezazo de Fernando Torres que Edwin Van der Sar salvo con un vuelo espectacular.
Poco a poco Manchester United mostró su conformidad con el 1-0, considerando que era un triunfo como visita. Resultado que pudo cambiar si es que el árbitro ve en los descuentos una falta de Evra sobre Ramires. Pero el juez Undiano Mallenco no cobró el penal y se ganó los furiosos reclamos de los locales, comenzando por los del técnico Carlo Ancelotti.