Los diseños de Madeleine Vionnet, revolucionaria de la moda de principios del siglo XX, y las innovaciones que introdujo en el mundo del diseño protagonizan la primera retrospectiva que se dedica a esta creadora francesa.
"Madeleine Vionnet, purista de la moda" ofrece un paseo cronológico a partir de mañana, miércoles, por la carrera de esta singular diseñadora a través de 130 diseños elaborados entre 1912 y 1939 y conservados por el Museo de Arte Decorativas de París.
Vionnet (1876-1975) "era una artista de la moda, como Picasso lo era en la pintura", destacó hoy la comisaria de la muestra y conservadora jefe de las colecciones de moda y textil del museo, Pamela Golbin.
La exposición, que podrá visitarse hasta enero de 2010, presenta en una primera parte los diseños que Vionnet realizó entre los años 1910 y 1920 y que ya reflejan las características propias de la modista, como la estructura de las prendas y la especial decoración.
La segunda parte se centra en la década de los treinta, cuando su estilo se consagró definitivamente.
Un sobrio ambiente claroscuro al combinar el espacio negro con los espejos y los cristales de las vitrinas, bajo una iluminación tenue, y el sonido ocasional de las palabras de la modista, conforman la cuidada escenografía creada por Andrée Putman para la exposición.
REVOLUCIONARIA DE LA MODA
Pionera de la utilización del "corte al bies" y del drapeado en sus diseños, Vionnet eliminó de sus propuestas el corsé y se decantó por vestidos largos y cómodos, de tejidos vaporosos como el tul, la muselina y el crepe de seda.
Esta modista que quería ser maestra revolucionó la estética de la mujer y permitió una verdadera transformación de la silueta, lo que supuso "una seña de la evolución de la emancipación del cuerpo femenino", explica la comisaria en el catálogo de la muestra.
Una selección de vitrinas temáticas muestran ciertas particularidades de sus creaciones como los flecos, las transparencias, los elementos brillantes y la introducción del círculo, el rectángulo y el cuadrado.
Para recibir al visitante, hay un maniquí de madera articulado de 80 centímetros, el mismo que sirvió en numerosas ocasiones a la modista gala para elaborar sus creaciones, que luego trasladaba a tamaño real.
MADELEINE VIONNET
Obligada por su padre a dejar la escuela con doce años, Vionnet entró entonces en un taller de costura y pocos años después se trasladó a Londres, donde aprendió la técnica.
En París pasó por la prestigiosa casa de moda de las hermanas Callot y lideró la modernización de la firma Doucet, que abandonó por no poder implantar sus ideas innovadoras, lo que le llevó a abrir su propia firma en 1912.
Fue la primera modista en tener conciencia de la necesidad de la conservación de su patrimonio, al crear etiquetas con su firma, que ponía en cada prenda.
A pesar de ser prácticamente una gran desconocida para el gran público, es considerada como una de las grandes de la moda francesa, al nivel de Coco Chanel, por muchos de los grandes estilistas actuales como Karl Lagerfeld o Jean-Paul Gaultier, quienes han reconocido su gran influencia en la Alta Costura.