En 2010, la Municipalidad de Santiago lanzó el Plan Capital, un proyecto que busca potenciar los atractivos turísticos de la capital. Como parte de esa iniciativa, en enero de 2013, Sernatur, seis municipalidades y algunas agrupaciones turísticas lanzaron un concurso para escoger una marca.

En septiembre, la comisión organizadora escogió dos imágenes y los ciudadanos, a través de la web, debían escoger la opción ganadora. Sin embargo, surgieron algunos reclamos en las redes sociales, especialmente por la escasa difusión del certamen.

La Corporación de Desarrollo de Santiago (Cordesan), entidad encargada de organizar el concurso, dio más plazo para votar y finalmente, a fines de octubre, se anunció que el logo creado por el diseñador UC Sergio Ramírez era el escogido como la marca de Santiago. Ayer por la tarde fue presentada oficialmente, en el Cerro Santa Lucía. Ahí , además, se dio a conocer dónde y cómo la podrán ver los santiaguinos.

Según explicaron en el municipio, será un elemento visual clave en toda la promoción de la ciudad. Es decir, será usado en una amplia gama de soportes: presentaciones audiovisuales, folletería, merchandising y workshops y ferias turísticas. Su debut será el próximo mes, cuando la municipalidad estrene una web dedicada a resaltar los atrac- tivos turísticos de la capital. Además, desde febrero el ícono estará disponible para que empresas y organismos que lo requieran puedan usarlo de manera adecuada en piezas de diferente tipo.

La alcaldesa Carolina Tohá destacó "el potencial que tiene para Santiago contar con una imagen que invada todos los espacios, que sea reconocible, usada y finalmente querida por todos. Es importante acostumbrarnos a ella y darle el uso correcto para hacerla propia", dijo.

De hecho, la intención del municipio es postular a fondos regionales para promocionar y difundir el logo en la ciudad y hacerlo familiar a través de publicidad callejera, en gigantografías o paletas publicitarias.

Ramírez indicó que, junto al equipo de la agencia Otros Pérez, hizo pequeños ajustes al diseño. Uno de ellos fue en la palabra "de", que antes iba diagonal y más pequeña. Finalmente, quedó horizontal y con una tipografía más grande. Además, se amplió el abanico de íconos identificables que lo acompañarán y que irán desde un volantín a un chinchinero, pasando por la Virgen del San Cristóbal.