La policía detuvo hoy a decenas de estudiantes que protestaban en Birmania (Myamar) contra la nueva ley de Educación, tras dispersar con violencia una manifestación, informan medios locales.
Algunos medios elevan a más de cien el número de detenidos, aunque las autoridades no han dado por el momento cifras de arrestados ni de heridos en la localidad de Lampadan, en el centro del país.
"Golpearon a los periodistas, así que tuve que huir", declaró un reportero al diario Myanmar Times, mientras que, según el medio The Irrawaddy, al menos dos ambulancias abandonaron el lugar de los enfrentamientos supuestamente con heridos en su interior.
La jornada de protesta contra la ley de Educación, aprobada el año pasado, congregó a unos 200 estudiantes en Lampadan, con la intención de marchar hasta Rangún, la antigua capital del país y situada a unos 120 kilómetros al sur.
La policía, que desplegó el doble de agentes que manifestantes, a los que acompañaban monjes budistas, les cortó el paso, pero tras unas negociaciones se comprometió a dejarles seguir con la protesta.
La violencia brotó cuando la policía volvió a cortarles el paso y los estudiantes no quisieron detener su avance, según The Irrawady.
Los manifestantes contra la reforma de la Ley de Educación, cuya protesta comenzó el pasado enero, pretenden que se incluyan en el plan de estudios las lenguas minoritarias y que se permita a estudiantes y profesores que formen sindicatos, entre otras reivindicaciones.