"Hace muchos años que México está preparado para que una mujer sea Presidenta. Yo pensé que para estas alturas ya habría una o dos, hubiera sido mejor", manifestó hace unas semanas Margarita Zavala, aspirante a candidata presidencial independiente de México para 2018. Con 50 años, la ex primera dama de ese país bajo la Presidencia de Felipe Calderón (2006- 2012), está decidida a conseguir el sillón que ya ocupó su marido.
Zavala lideraba hasta el jueves las firmas entre los aspirantes a candidatos independientes, que deben reunir 866.593 firmas de apoyo ciudadano, con fecha tope de febrero de 2018. Ayer se informó que Zavala lleva 94.495 firmas, sólo superada por el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez "El Bronco", quien suma 95.054. Sin embargo, la corta carrera de Zavala en su ruta hacia la Presidencia no ha estado exenta de obstáculos.
El 6 de octubre de 2017, Zavala renunció al Partido Acción Nacional (PAN), tras 33 años de militancia. La salida se debió a que la ex primera dama no encontró el apoyo suficiente para su aventura presidencial. "Hice todo lo que estuvo en mis manos para lograrlo, durante dos años pedí un método democrático transparente y claro, que se escuchara a los ciudadanos para ofrecer una decisión, pedí reglas, lo pedí en público y en privado, lo pedí en la Comisión Permanente, por escrito y en video: la respuesta siempre fue una evasiva", señaló Zavala al justificar su renuncia al PAN.
La abogada ya había manifestado en 2015 sus intereses presidenciales, por lo que seis días después de retirarse de las filas del PAN, se registró ante el Instituto Nacional Electoral para lograr su objetivo por la ruta independiente.
Fue gracias a su madre que Zavala conoció al PAN y se afilió a las juventudes del partido a los 16 años. Durante su militancia conoció a Felipe Calderón en 1984 y se casaron casi una década más tarde. Hoy tienen tres hijos.
En 1994 llegó a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal como diputada local. Nueve años después arribó a la Cámara de Diputados, desde donde se desempeñó como operadora de la candidatura presidencial de Calderón. Su rol como primera dama fue calificado como discreto y pasivo frente a las víctimas de la guerra contra el narcotráfico, sostienen en México.
"Margarita Zavala es un personaje bastante popular, pero yo pienso que ha sido un error su candidatura. Por un lado ha puesto fin a las posibilidades que el PAN tendría de haber llegado al poder al dividir el voto de la derecha, y por otro lado, yo creo que es muy difícil hoy en día en México que un candidato independiente pueda tener éxito en una elección de estas características", asegura Agustín Sánchez Andrés, miembro del Sistema Nacional de Investigadores de México. Este investigador sostiene que fue un error de cálculo, no solo de parte de Zavala, "sino sobre todo de su esposo Felipe Calderón que es el que realmente está detrás de su candidatura. Ella es de los pocos candidatos independientes que tiene más posibilidades para conseguir el número de firmas necesarias, pero inscrita como independiente sin el apoyo de una maquinaria electoral, yo creo que tal como funciona el sistema electoral mexicano, es realmente muy difícil", dice.
Según el columnista del diario mexicano Excélsior, Francisco Garfias, Margarita Zavala le habría pedido al presidente del Partido Nueva Alianza (Panal) ayuda para juntar firmas, puesto que se sentiría amenazada por "El Bronco", quien le iba pisando los talones en número de firmas y le estaría quitando el liderazgo. Zavala habría dicho: "Me va a rebasar, trae estructura". De todos modos, aún le restan más de dos meses para alcanzar la meta.