"Tengo un sexto sentido, y tiendo a achuntarle con los proyectos", dice Mariana Loyola, quien confirma que será parte de la próxima teleserie vespertina de Mega.

Con esto, la actriz vuelve al género que por opción abandonó hace cuatro años, cuando se empezó a a desencantar con la realización y los temas que éstas estaban abordando.

"Sentí que las teleseries tuvieron un bajón en términos de realización y en sus temáticas. Yo empecé a hacer más películas, más series, y me empecé a desencantar, pero no del género como tal", aclara la intérprete que también regresará al teatro en octubre con la obra Flores de papel.

¿Y este regreso es porque cree que ese bajón ya pasó?

Es que el bajón fue para mí, que soy una espectadora entre cien mil. A la gente, al parecer, le sigue gustando. Esto tiene que ver con las expectativas y los gustos de uno, y yo soy súper exigente. Lo mío tiene que ver con los guiones, el director, el elenco, porque también me han llamado para hacer películas y he dicho que no, y así también con el teatro y la publicidad. En definitiva, busco historias que me remezcan, que me exijan como actriz. Esta teleserie que haré me pareció bastante interesante, y la escribe Rodrigo Cuevas, con quien trabajé en Peleles (Canal 13). Me da cierta confianza que él sea parte de esto, y también está entretenido el elenco.

¿Siempre ha tenido esa postura frente a los proyectos?

Siempre. Cuando era chica, tuve la suerte de que mi primera teleserie fuera Amores de mercado (TVN), y luego me embaracé, tuve a mi hija, y volví para hacer Machos (Canal 13). Entonces, mi nivel de exigencia partió con la vara muy alta porque esas son las dos mejores teleseries que se han hecho en Chile, a mi gusto, y al de mucha gente.

¿Cuál es su opinión sobre el actual escenario de las teleseries en nuestra televisión?

Mi impresión es que los canales y la televisión tendrán que dar un vuelco pronto, y empezar a hacer más series. Tendrán que empezar a hacer producciones no tan largas como una teleserie, o sumar a las teleseries otro tipo de producciones. Yo me siento súper beneficiada, media bendecida. No sé si es mi mamá que está allá arriba, pero yo he tenido mucha suerte. He hecho lo que he querido y nunca he parado de trabajar. Cuando algunos colegas me dicen que no hay pega, yo pienso que no, que sí hay pega. Pero esto tiene que ver con mi historia, porque conozco actores y actrices que están sin pega hace mucho rato.

¿Cree que puede jactarse de haber trabajado solo en buenos proyectos?

Mi primer contrato fue con Canal 13, donde hice algunas cosas mejores que otras. Pasa que yo empecé a hacer cine y teatro antes que televisión. Ya venía enamorada de esa otra rama de la actuación. Tiene que ver con las exigencias y gustos de cada uno. Y tampoco soy una mujer que esté tan enamorada de la plata, puedo vivir con menos. No estoy dispuesta a hacer cualquier cosa. Es un privilegio, la verdad".