"Espero que este ministerio haga mucho y le cambie la cara al país", dice Mario Hamuy, asesor científico de la Presidencia, quien encabeza las negociaciones en el Congreso para que se apruebe el Ministerio de Ciencia y Tecnología (CyT). Uno de los efectos que tendrá esta nueva institucionalidad, asegura, es que permitirá reunir más recursos, una de las quejas permanentes desde la comunidad científica. "No basta con pedir plata sino hay que preguntarse para qué. Un aumento del presupuesto para ciencia, tecnología, investigación y desarrollo e innovación, no puede ser dado sin una estrategia que lo acompañe y este ministerio va a proveer esa estrategia", señala.
El astrónomo, plantea que hoy el gasto en investigación y desarrollo es de 0,4% del PIB, cifra que podría aumentar al 1% del PIB en una década tras la creación del nuevo ministerio, al que se destinarán 5 mil millones de presupuesto para su diseño operativo que incluirá la contratación de unas 100 personas.
"Existe el compromiso de los senadores para que este proyecto salga aprobado durante este año", dice sobre la discusión de la iniciativa que se da en pleno año electoral.
El proyecto ya ha recibido 155 indicaciones y se discute en la Comisión Desafíos del Futuro del Senado, donde uno de los nudos ha sido cómo entender el concepto de innovación dentro del ministerio para trazar una clara frontera de competencias con la labor que en la materia realiza el Ministerio de Economía a través de la Corfo. El concepto no es trivial, ya que incluso una de las indicaciones de los senadores apunta a que el nombre de la nueva repartición incluya este concepto.
¿El proyecto permitirá una sinergia entre todos los organismos o tendremos choques de competencias entre Corfo y el Ministerio de CyT?
El proyecto de ley que se presentó en realidad es una reforma estructural al sistema de ciencia, tecnología e innovación, no es solo la creación de un ministerio de ciencia y tecnología. Se está creando por ley el Consejo Nacional de Ciencia Tecnología e Innovación para el Desarrollo, que es el sucesor del actual Cnid (consejo de innovación); se está creando un Ministerio de Ciencia; también un comité interministerial de coordinación entre los tres ministerios que son los principales actores del sistema, el de Educación, el de CyT y el de Economía; y ahí se está generando un espacio para que haya una coordinación interministerial y se produzcan, y elaboren políticas públicas coherentes, que no choquen y que se evite el desorden y las duplicidades que existen el sistema.
Sobre el punto, en la discusión en el Senado se planteó el tema de las innovaciones comerciales versus las científicas…
El lunes estábamos discutiendo el ámbito del Ministerio de CyT en lo que respecta a innovación y el ámbito del Ministerio de Economía en cuanto a innovación y existe un acuerdo bastante general, y eso refleja el modelo que hemos propuesto, que la innovación sobre base científica y tecnológica esté radicada en el Ministerio de CyT y que la innovación empresarial en el de Economía y en la Corfo. Son dos vectores que suman y ahí hay que definir exactamente con más precisión los límites, hasta dónde queremos que llegue el Ministerio de CyT y dónde parte el de Economía, esta discusión todavía no se zanja la vamos a retomar en la comisión. Lo más importante es que haya una coordinación por arriba (…) ambas agencias tienen su grado de especialización, su historia, sus tradiciones y hay que respetar eso, aquí no estamos partiendo de una hoja en blanco, la hoja está rayada, y dice Conicyt, Corfo, Iniciativa Científica Milenio, dice muchas cosas, entonces tú no puedes partir borrando esta hoja y armar un modelo de cero, tiene que recoger lo que existe, ordenarlo y darle coherencia.
En el debate en el Congreso, el senador Guido Girardi planteó que hay instituciones que tienen miedo a perder sus "parcelas de poder", ¿Ha observado ese fenómeno?
No…de frentón no veo esa territorialidad a la que se ha aludido. De hecho hay un acuerdo complementario al proyecto de ley de que hay algunos instrumentos de la Corfo que pasan al Ministerio de CyT, que son las oficinas de transferencia y licenciamiento, las OTL (…) que llevan el prototipo que se genera en el campus al mercado. También es parte del acuerdo entre Corfo y el Ejecutivo que los centros de excelencia internacionales de la Corfo y los centros de desarrollo tecnológico pasan a tener una gobernanza presidida por el Ministerio de CyT. Eso demuestra que parte de los centros de Corfo van a ser gobernados o administrados por el Ministerio de CyT.
¿Qué tipos de duplicidades existen hoy en el sistema y que podría corregir el nuevo ministerio?
Hoy día existe la Iniciativa Científica Milenio (ICM) en el Ministerio de Economía que financia grupos de investigación asociativas, que son los Institutos Milenio; los consejos del Fondecyt administran un fondo que se llama Fondap que también apunta a crear grupos de investigación asociativa al interior de las universidades; y también Conicyt tienen hoy un programa de financiamiento basal que financia esencialmente lo mismo, con algunos sabores distintos, entonces tienes tres instrumentos que están apuntando hacia a lo mismo pero no se coordinan y no hay una supervisión general con una política clara y coherente a lo que el país espera de estos grupos de investigación.