por Ramiro Fuenzalida, enviado especial a Bursa
La suspensión por tarjetas amarillas de Bryan Rabello trajo un problema grande para Mario Salas y la selección chilena Sub 20.
El talentoso volante no estará ante Croacia y el entrenador ya trabaja junto a su cuerpo técnico para definir el reemplazante del mediocampista del Sevilla.
Ya sin
Diego Rojas
(fue marginado por lesión), su reemplazante natural como se vio en el Sudamericano de Mendoza, el técnico baraja nombres y también fórmulas para minimizar la ausencia y potenciar el equipo.
Así, dentro de las opciones que comentó a su staff está jugar con dos delanteros, incorporando un volante más a la zona media, modificando su tradicional 4-2-3-1 a un 4-2-2-2 flexible,
permitiendo la salida de Angelo Henríquez de la banda derecha para subir y acompañar a Nicolás Castillo en el centro del ataque.
Salas cavila este dibujo táctico. Piensa en que los habituales contenciones (
César Fuentes y Sebastián Martínez
) sean acompañados por un volante mixto, como
Oscar Hernández
, y por otro generador, como
Nicolás Maturana o Cristián Cuevas
, ambos acostumbrados a moverse por las bandas, pero también con la capacidad suficiente para asumir la salida rápida del equipo, en algo que les pide y es vital para Salas.
Igualmente, el estratego mira con premura, pues de aquí al miércoles, día en que Chile enfrenta a Croacia por los octavos de final, la idea es trabajar fuerte y dar con la fórmula que supla la ausencia de Rabello.
Bravo, la otra carta
La ductibilidad que le da la plantilla hace evaluar a Salas jugar con dos delanteros netos, pensando en que los mediocampistas que contempla para el trascendental encuentro de pasado mañana le dan desborde por los costados, algo prioritario en la apuesta futbolística chilena.
Sin embargo, el entrenador está más que conforme con el desempeño que ha tenido el delantero
Christian Bravo
, instancia que lo hace evaluar sostener su intransable esquema, incluyendo a Bravo, en un 4-2-3-1, como el volante ofensivo por la derecha, dejando a Maturana en la posición de Rabello, lo que ya hizo en el arranque ante Irak, y reubicando a Henríquez por la banda izquierda, dejando a Castillo como el exclusivo referente de área.
"Yo estoy para aportar al grupo y jugar donde me diga el 'profe' (Salas). Si estoy dentro o fuera de la cancha, voy a dar todo porque el equipo gane"
, dijo Bravo tras el último partido.
Su opción suma votos por la verticalidad y explosión de su estilo. "Nos da eso distinto que necesitamos", dijo recientemente el DT.
Más alejado de una hipotética titularidad para asumir la conducción asoma el audino Diego Valdés, quien no ha sumado minutos en el torneo.
"Se están viendo todas las alternativas y fórmulas. Entre mañana (hoy) y martes se definirá quién ingresa, pero debería salir de entre los nombres que se mencionan"
, adelantan en la delegación.