Un centenar largo de manifestantes y 11 agentes  resultaron heridos este domingo cuando la policía antidisturbios de Kuwait se  enfrentó con gases lacrimógenos y balas de caucho a decenas de miles de  opositores que protestaban contra una enmienda de la ley electoral, indicaron  testigos y fuentes oficiales.

"El número de manifestantes heridos en el hospital superó los 100 después  de que la policía antidisturbios los atacara", indicó en su cuenta de Twitter  el director de la Sociedad Kuwaití de Derechos Humanos, Mohammad al Humaidi.

El Ministerio de Interior indicó en un comunicado que 11 policías  resultaron heridos por pedradas de los manifestantes.

El exdiputado Abdula al Barghash y otros activistas cifraron en más de  100.000 el número de manifestantes, en lo que podría ser la mayor concentración  en la historia de este emirato del Golfo. Observadores independientes, en  cambio, dijeron que había algo más de 30.000 manifestantes.

Los choques comenzaron cuando la policía intervino para impedir la  concentración de los opositores en tres puntos distintos de la capital y detuvo  a varias personas, entre ellas el ex diputado islamista Walid al Tabtabai,  indicaron los organizadores en Twitter.

La policía usó gases lacrimógenos para dispersar a la muchedumbre,  indicaron testigos.

En respuesta, los organizadores invitaron a manifestarse en otro barrio de  la ciudad, donde los manifestantes cortaron durante horas la carretera costera  Arabian Gulf Road, de gran importancia.

Entonces, la policía antidisturbios intervino usando primero gases  lacrimógenos y bombas de ruido y más tarde balas de caucho para dispersar a la  multitud, liderada por ex diputados opositores.

"Parece un campo de batalla", dijo Mohammad Rashed, un empleado  del sector privado, al irse de la zona, acompañado de su esposa y otros  familiares.

Los opositores habían previsto "la mayor manifestación en la historia de  Kuwait" para protestar contra la decisión de las autoridades de enmendar la ley  electoral, antes de las elecciones legislativas anticipadas del 1 de diciembre  próximo.

La ley electoral, adoptada en 2006 después de las manifestaciones  organizadas por la oposición, divide el país en cinco circunscripciones, cada  una de las cuales elige a 10 diputados. Cada elector puede votar a un máximo de  cuatro candidatos.

La enmienda propuesta por el Gobierno quiere reducir a uno o dos el número  de candidatos que puede elegir cada persona. Según los activistas, el objetivo  del ejecutivo es que el Parlamento electo sea apenas una caja de resonancia del  poder.

La oposición, que ha decidido boicotear las elecciones del 1 de diciembre, dijo que la enmienda es un golpe contra la Constitución. 

El emir, jeque Sabah al Ahmad al Sabah, que disolvió el Parlamento el  pasado 7 de octubre, afirmó haber tomado la decisión de enmendar la ley  electoral para "proteger la unidad nacional", ya que la división establecida  contribuía a separar Kuwait según criterios religiosos y tribales.

Este domingo, el emir se reunió con jefes de tribus que, citados por la  agencia oficial Kuna, manifestaron su apoyo al jefe de Estado tras la audiencia  celebrada. Las zonas tribales precisamente son feudos de la oposición.

La tensión política impactó en la bolsa kuwaití, que perdió 3,05% al cierre  de la sesión de este domingo, la mayor caída en una sola jornada en más de tres  años.

Kuwait, miembro de la OPEP (Organización de Países Exportadores de  Petróleo) y que fue la primera monarquía del Golfo en tener un parlamento  electo en 1962, sufre desde 2006 crisis políticas frecuentes. La dinastía de  los Al Sabah reina en este emirato desde hace más de 250 años.