Más de 260 mil personas se acercaron al Centro Cultural Estación Mapocho para visitar la Feria Internacional del Libro de Santiago, que se realizó entre el 29 de octubre y el 14 de noviembre, y que congregó a más de medio millar de autores chilenos y cerca de 70 escritores extranjeros.

"Se han cumplido los objetivos trazados y superado las expectativas" dijo, mediante un comunicado, el presidente de la Cámara Chilena del Libro, Eduardo Castillo, refiriéndose a la trigésima edición de la feria que este año estuvo dedicada al Bicentenario de la Independencia de Chile.

Según los organizadores, el evento concluyó con balance positivo debido a una "exitosa respuesta del público y la alta venta de libros".

"Hemos celebrado de la mejor manera los 30 años de la feria en el Bicentenario, con un marco de público impresionante que habla claramente del creciente interés por el libro en nuestro país", sostuvo Castillo.

En el evento cada una de las quince regiones chilenas presentó en su propio pabellón lo mejor de su cultura y literatura, así como algunos de los autores emergentes de las letras nacionales.

Además estuvieron presentes escritores chilenos consagrados como Roberto Ampuero, Jorge Edwards, Alejandro Jodorowsky y Hernán Rivera Letelier. Desde el extranjero visitaron la feria el peruano Antonio Cisneros, el mexicano José Javier Villarreal y los españoles Justo Jorge Padrón y Paco Ignacio Taibo II, además de la colombiana Ingrid Betancourt, que presentó el libro que escribió sobre su cautiverio en manos de la guerrilla de las FARC.

También pasó por la Feria María Kodama, la viuda de Jorge Luis Borges, que presentó el último tomo de las obras completas del gran escritor argentino y el cantautor español Joan Manuel Serrat que homenajeó al poeta Miguel Hernández, con motivo del centenario de su nacimiento.