Más de dos millones de ciudadanos en Cataluña ignoraron hoy el veto del Tribunal Constitucional español a la consulta simbólica sobre la independencia de la región del noreste de España y acudieron a las urnas que el gobierno catalán de Artur Mas dispuso en un desafío al Ejecutivo de Mariano Rajoy.

Con el 88,44% de las mesas contabilizadas, se esperaba que cerca de seis millones de catalanes mayores de 16 años pudieran elegir entre las preguntas "¿Quiere que Cataluña sea un Estado?", y en caso afirmativo "¿Quiere que sea un Estado independiente?".

El 80,72% de los participantes de la consulta alternativa catalana votaron a favor de la independencia, según datos difundidos por el gobierno regional catalán, mientras que un 15% de los participantes se mostraron contrarios a la independencia.

Asimismo el 4,55% (92.939 personas) votó "no", y un 10,11% (más de 206.000) lo hizo por el "sí" a la primera pregunta y "no" a la segunda pregunta.

El presidente catalán Artur Mas indicó en una primera intervención tras el cierre de las urnas que "Cataluña ha dejado muy claro una vez más que quiere gobernarse a sí misma". "Queremos decidir nuestro futuro político y queremos que este derecho nos sea reconocido", agregó, calificando de "éxito total" la consulta no oficial celebrada en la región y pidiendo a Rajoy que le permita celebrar en el futuro un referéndum definitivo con plenas garantías.

El gobierno español, que se opuso desde el principio a la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña, calificó la votación de "simulacro estéril e inútil" y no reconoció la validez de los datos ofrecidos por el Ejecutivo catalán.

"Es un acto de pura propaganda que solo ha servido para exacerbar la división entre los catalanes y tensar las relaciones políticas", dijo el ministro español de Justicia, Rafael Catalá, el único miembro del gabinete de Mariano Rajoy que habló hoy públicamente.

Catalá anunció durante su comparecencia que en los próximos días se tomarán medidas legales si la Fiscalía encuentra responsabilidades penales en torno a la celebración de la consulta.

La jornada de votación arrancó en medio de la incertidumbre después de que el Ministerio Público abriera diligencias ayer para investigar si había delito en la cesión de los locales públicos que acogieron las urnas y pidiera que se identificara a los responsables de su apertura.

"Si la Fiscalía quiere conocer quién es el responsable de abrir los colegios que me miren a mí. El responsable soy yo y mi gobierno, aunque espero que impere el sentido común", zanjó Mas ante los medios de comunicación cuando votó durante la mañana.

Pero en sus informes hoy a los juzgados de guardia, el Ministerio Público desaconsejó la retirada de las urnas y la detención de los organizadores de la votación al considerar que serían "medidas desproporcionadas", por lo que la jornada concluyó sin incidentes.

En este contexto, varios jueces de Cataluña rechazaron paralizar la votación, tal y como les reclamaban en sus denuncias colectivos antiindependentistas y partidos como UPyD, cuarta fuerza política en el Parlamento español.

Los colectivos pro independencia que organizaron en los últimos tres años las grandes manifestaciones secesionistas calificaron las cifras de participación de "extraordinarias".

Un porcentaje significativo de los catalanes llamados a votar, cerca de la mitad, respondió al reto del presidente Mas y acudió a los más de 1.300 locales de votación repartidos por todo el territorio regional a pesar de que se trataba de una consulta no oficial ni vinculante, con urnas de cartón y sin supervisión institucional.

Entre ellos, algunos rostros conocidos como el ex entrenador del Barcelona y actual técnico del Bayern Múnich, Josep Guardiola; el cantautor Lluís Llach, o el actor Juanjo Puigcorbé.

El presidente catalán destacó el "gran civismo" con el que se desarrolló la jornada y agradeció la labor de los más de 40.000 voluntarios que llevaron el peso de la votación.

"Han hecho que hoy en Cataluña hayamos hecho algo grande, muy grande", dijo. "Hoy se ha producido una simbiosis perfecta entre instituciones públicas, tejido asociativo y personas. Cuando vamos juntos, avanzamos más y mejor".

Mas dejó abierta la puerta a un adelanto electoral en clave plebiscitaria acordado con el resto de partidos soberanistas.

Los comicios podrían ser, a su juicio, la única alternativa para que los ciudadanos decidan con garantías el futuro político de la región si el gobierno de Rajoy se sigue negando a pactar un referéndum.

El presidente catalán prevé enviar mañana al jefe del Ejecutivo español una carta para hacer balance de la consulta de hoy e instarle a negociar.