A cuatro años de la implementación del Plan Auge, la Superintendencia de Salud entregó un balance global sobre la evolución del sistema. Más de ocho millones de personas, la mayoría de Fonasa (94% de los casos), han sido beneficiarios.

Los problemas de salud más requeridos desde 2005, está la Infección Respiratoria Aguda (más de un millón de casos) que se repite tanto en el sistema público como en las isapres. Le sigue la salud oral integral para niños de seis años y la analgesia del parto.

También se observan enfermedades que si bien no son las más habituales, han aumentado sustantivamente. En Fonasa está el infarto agudo al miocardio, el cáncer gástrico y la artrosis de cadera. En isapres, la operación de vesícula y también el cáncer gástrico.

Desde 2006 también se aprecia un aumento significativo de las prestaciones asociadas a la depresión en personas de 15 años y más, con cerca de 575.000 casos.

RECLAMOS
El Superintendente Manuel Inostroza dijo que si bien los reclamos del usuario Auge han ido aumentando, "siguen siendo porcentualmente bajos en relación al universo de usuarios".

En 2008 hubo 2.500 reclamos en Fonasa y 250 en isapres. En 2005 se registraban 300. "Todavía hay gente que puede que esté desinformada, pero tiene que ver también en que  la percepción del sistema es bueno".

ENCUESTA
La Superintendencia a través de un estudio de opinión, explicó que aún no se consolida un conocimiento masivo del Auge. Un 47% sabe de qué se trata el plan, pero un 31% lo conoce más o menos y un 22% derechamente no lo conoce. Existe eso sí un menor desconocimiento que en la medición anterior, en los usuarios de Fonasa (46% sabe versus un 43% del 2007).

"Cada año mejora el conocimiento, pero todavía tenemos un desafío de que ojalá un porcentaje mucho mayor conozca como opera el Auge. Hacemos un llamado a la ciudadanía que se acerque a Fonasa y las isapres, pues ellos tienen la obligación legal de informar sobre sus derechos", manifestó Inostroza.

En todo caso según el 60% de la ciudadanía con el Auge la atención de salud en Chile ha mejorado, versus un 25% que dice que sigue igual.