La miel es un alimento que no sólo tiene innumerables propiedades para la salud y la nutrición, sino que también para la piel. Ya que puede ser usada en varias mascarillas para devolverle al cutis ese toque luminoso y saludable que se necesita.

Es importante recordar que la miel no necesita preservantes ni refrigeración, y por lo demás es rica en aminoácidos y enzimas vitales para las células. Por ello es uno de los ingredientes más utilizados en cremas humectantes para el rostro, ya que tendría un efecto antiedad en la piel.

Aunque esos efectos se pueden comprobar en la misma casa, ya que se pueden preparar una serie de mascarillas caseras para lucir una piel resplandeciente y vital.

MASCARILLAS
Por ejemplo, después de la limpieza y exfoliación del cutis, es recomendable aplicar sobre la cara y el cuello una delgada capa de miel, dejarla actuar por 10 minutos y retirarla con abundante agua tibia. Y luego aplicar el tónico y la crema hidratante de uso diario.

Otra receta incluye leche y miel, y tiene un efecto humectante para todo tipo de pieles. Para ello se necesitan 2 cucharaditas de miel y 2 de leche.

Dichos ingredientes se deben mezclar bien y aplicar sobre el cutis limpio, dejar actuar la mascarilla por 10 minutos y lavar con agua tibia.

La mascarilla de miel y yogurt, en tanto, humecta y purifica la piel. Una cucharadita de miel y otra de yogurt natural se mezclan y se aplican sobre la piel limpia. Se deja actuar por 10 minutos y se lava el rostro con abundante agua.

Un algo más exótica, es la mascarilla de frutillas y miel, la que sirve para piel normal, mixta y grasa. Se necesitan dos frutillas, 1 cucharadita de yogurt natural, 1/4 de cucharadita de miel y 1/2 cucharadita de maicena.

Se debe mezclar todo en una licuadora y aplicar esa preparación en la piel limpia, dejándola actuar por 10 minutos o más.