Una pausa en su cartera de inversiones en el sector eléctrico puso Energía de la Patagonia y Aysén (EPA), empresa dedicada al desarrollo de proyectos de generación hidro de pequeña y mediana escala, debido a la baja en el precio de la energía.

La compañía, controlada por Invercap -matriz del grupo CAP-, maneja un portafolio de 12 proyectos que suman 150 MW de potencia, y que se añaden a las dos centrales en operaciones: La Arena y Cuchildeo, ubicadas en Puerto Montt y Hornopirén, respectivamente, las que produjeron 42% y 38% por debajo de lo esperado a causa de las menores lluvias. Todo esto, advirtieron desde la compañía, ha complicado el acceso a financiamiento para continuar invirtiendo.

"El difícil escenario antes mencionado ha complejizado el acceso a fuentes de financiamiento, lo que sumado a la señal de precios establecida por la Licitación de Suministro Eléctrico a Distribuidoras ocurrida en julio de 2016, ha incrementado la importancia de acceder a esquemas de comercialización de energía que permitan estabilizar flujos y acceder a los precios finales de energía, para proyectos de centrales hidroeléctricas de pasada", señaló la compañía de manera oficial.

Al cierre del ejercicio 2016, la sociedad matriz EPA S.A. registró pérdidas por US$ 1,8 millón, cuyo valor corresponde a sus gastos de administración y la consolidación del resultado de sus filiales.

El presidente de Invercap, Roberto de Andraca, comentó en la Memoria 2016 de la matriz del grupo CAP que el año pasado la filial EPA "debió continuar ajustando sus gastos y revisando sus proyectos como consecuencia de la persistente baja en el precio de la energía eléctrica que se produce como resultado de los menores precios del carbón, gas y petróleo que se viene observando en el mercado internacional".

A esto se suma "el muy bajo crecimiento de la demanda que tiene el país", indicó de Andraca en carta a los accionistas.