El grupo textil español Inditex, matriz de Zara, cumplió las expectativas de los analistas con sus resultados a nueve meses y o sorprendió positivamente al anunciar una aceleración de sus ventas.
Inditex, el mayor distribuidor de ropa en el mundo con más de 1.000 millones de piezas al año, cerró los primeros nueve meses de su ejercicio con un beneficio casi plano, pero con crecimiento superior al 10% en los ingresos subyacentes al continuar la compañía con su expansión global.
La empresa dijo que registró en los primeros nueve meses (febrero a octubre 2014) un beneficio atribuible de 1.687 millones de euros (US$2.100 millones), un aumento del orden del 1% sobre el mismo periodo del año anterior y en línea con las previsiones del mercado.
Los analistas esperaban un beneficio neto plano de 1.668 millones de euros, reflejando todavía la evolución adversa de los tipos de cambio en algunos de sus mercados.
Inditex cuenta con 6.570 tiendas en 88 países, de las cuales cerca de la mitad facturan en divisas ajenas al euro, incluyendo yenes, liras turcas o rublos rusos, que se han depreciado de forma notable frente al euro en el último año.
El margen bruto bajó en 100 puntos básicos al 58,9% de las ventas, pero la compañía señaló que parte de este descenso (40 puntos básicos) se debe a la compra de su proveedora Tempe.
El gigante español de la moda dijo que las ventas subieron en el periodo un 7% a 12.709 millones de euros, por encima de las previsiones de los analistas (12.633 millones). A tipo de cambio constante, el aumento de los ingresos fue del 10,5%.
Respecto a la tendencia para el cuarto trimestre (noviembre a enero) el grupo textil dijo que las ventas en tienda y online a tipos de cambio constante han aumentado un 14 por ciento entre el 1 de noviembre y el 8 de diciembre.
La compañía sigue apostando por un crecimiento sostenido de su negocio en sus próximos años y, según el diario Cinco Días, baraja planes para ampliar en un tercio su mayor centro de distribución mundial de ropa ubicada en las afueras de Madrid.