"Esto va a ser una gran porquería". Eso fue lo que pensó Matt Damon la primera vez que vio la armadura que usaría durante casi dos meses para convertirse en Max, su personaje en Elysium, la nueva cinta de ciencia ficción del director y guionista Neill Blomkamp (Sector 9), que debutó ayer en Norteamérica y llega a salas locales el 10 de octubre. Pero cuando se la probó -dice sentado en un salón con vista al mar en el hotel Ritz Carlton de Cancún, en conversación con La Tercera-, se dio cuenta de que aunque pesaba más de 10 kilos, se podía mover bastante bien con el armatoste.
Elysium, donde Damon comparte elenco con Jodie Foster, está ambientada en el año 2154, cuando el planeta tierra está sumido en la miseria ecológica y financiera, mientras los ricos del mundo viven en una estación espacial sin necesidades, enfermedades ni delincuencia. La acción comienza cuando el personaje de Damon se revela a sus condiciones en la tierra y busca llegar a la estación espacial a cualquier precio. Jodie Foster interpreta a la villana Delacourt, que custodia la fortaleza ayudada por el mercenario interpretado por Sharlto Copley (Sector 9).
"Max es un tipo que aspira a ir a Elysium (nombre de la estación espacial) cuando es pequeño, pero renuncia a ese sueño. Luego se enferma y tiene sólo cinco días de vida y debe subir para allá. Es una historia muy simple de seguir en términos narrativos, pero este mundo es tan interesante y complejo que es mucho más satisfactorio que sólo entretención", explica Damon.
Según cuenta, un factor determinante para interesarse en esta historia fue Blom-kamp. "Al ver Sector 9, tenía muchas ganas de trabajar con él, y cuando nos juntamos, a los 15 o 20 minutos sacó un libro y me empezó a mostrar estas imágenes que había hecho en su computador. Creó todo este mundo, hasta el detalle más pequeño. Me recordó cuando hablé con James Cameron sobre Avatar. Al hablar con Neill, pensé: 'Es como James Cameron, este mundo existe y necesita de nosotros para manifestarlo'", explica, añadiendo que "mi personaje y su look eran parte de eso: con la cabeza rapada y los tatuajes. Y existían antes de que yo llegara".
El actor reconoce que Ely-sium funciona como una metáfora de los privilegios del primer mundo, pero hace una pausa al responder si siente culpa por ser un miembro. "Ah... No la siento. Lo que sí, me siento afortunado de haber nacido donde nací. Particularmente mientras la grabamos, porque fue en el vertedero de Ciudad de México, donde viven 25 mil personas, algunos de ellos nacen, crecen y mueren ahí. La pregunta es cómo sacamos a la mayor cantidad de gente de esa pobreza".
Esta es la segunda cinta de Blomkamp y al igual que en Sector 9, que emulaba el apartheid de su natal Sudáfrica, tiene un alto contenido social. "Creo que un buen filme de ciencia ficción puede generar identificación: construyen otros mundos, pero realmente resuenan. Y si bien Neill dice que esto es el futuro, realmente habla de ahora. La disparidad entre el más rico y el más pobre en la tierra es tan descarnada como gente viviendo en una nave espacial y otra en el tercer mundo".
En cuanto a las ofertas para proyectos futuros, el actor asegura que no tiene de qué quejarse. "Me estoy volviendo más viejo y los roles también se están volviendo más interesantes. Para los hombres de mi edad este es el mejor momento en Hollywood: la mayoría de los roles se escriben para hombres de mi edad. Así que espero que se vayan volviendo incluso mejores". Y llega justo a tiempo, porque, explica: "¡Sólo me tomó 15 películas el estar cómodo!", dice de buen humor. Dos de sus roles más recientes son de alto perfil: Behind the candelabra, sobre Liberace, dirigida por Steven Soderbergh y por el que está nominado al Emmy, y The monuments men, con George Clooney como director y coprotagonista. "Estamos muy bien. Las escenas van muy bien y tengo grandes expectativas sobre la película", adelanta acerca del filme ambientado en la Segunda Guerra Mundial, que es una tempranera candidata al Oscar.