Corría octubre de 2004 y el destacado filósofo francés Jacques Derrida moría en París, a los 74 años. Meses antes había sido contactado por el filósofo chileno Max Colodro, quien lo invitó a participar en el Día Internacional de la Filosofía, que se realizaría en Chile en 2005. Por primera vez el encuentro se celebraba fuera de Francia.
El evento fue un éxito, y en la memoria de Colodro quedaron presentes las conversaciones con el intelectual, que desarrolló el pensamiento conocido como la deconstrucción.
Sobre la importancia de esos diálogos con Derrida, Colodro escribió una serie de ensayos publicados en el libro Ontología de la ausencia, con el subtítulo de La metáfora en el horizonte de la desconstrucción.
Colodro, sociólogo y doctor en filosofía, propone en el volumen el lenguaje como el sentido mayor para elaborar un discurso social. "Lo único que podemos seguir sosteniendo es el lenguaje y construir identidades comunes", dice y agrega convencido, "la única presencia que sobrevive es el lenguaje". El argumento para pensarlo está a la vuelta de la esquina. "Vivimos en una sociedad donde los referentes culturales más básicos ya no están. Las identidades nuevas se asocían al consumo y el éxito personal. Hoy estamos en una época de búsqueda y a la vez de incertidumbre".
Ahora, Colodro está en otra búsqueda: la desconstrucción de la Cábala judía. "El misticismo y la relación de la ausencia", dice.
Un proyecto, que finalizará en un libro aún sin fecha. El trabajo es mayor. Es el análisis del pensamiento esotérico relacionado con el judaísmo. Por lo menos el desafío está en camino.
