Harold Mayne Nicholls vuelve al fútbol. Al menos de forma oficial. El ex presidente de la ANFP cumplió el castigo que, finalmente, el TAS redujo a dos años después de que la FIFA lo castigara inicialmente con siete por incumplir el Código de Etica.
El dirigente se desahogó a través de su blog. "Me sancionaron hace más de 2 años. Pagué 9 días más que lo que el TAS estimó como un castigo apropiado. El organismo máximo de apelación deportiva no fue tajante en su dictamen. A mi me pareció una sanción salomónica 'como ya cumplió dos años, pues dejemos el castigo en dos años'", escribió.
Luego habló de su regreso. "Hoy decidí volver al fútbol de manera oficial. En un país de amigos y en un torneo que desde 1994 ayudo -de manera gratuita- haciendo contactos para traer clubes a participar. Este año hay 42. Yo cooperé con 2. Me refiero a la Super Cup NI (antes Northern Ireland Milk Cup) en Coleraine, Irlanda del Norte. Con la Fundación Ganamos Todos hace 6 años que traemos equipos a participar de este torneo, que debe ser de los mejores del mundo para infantiles y juveniles. Primero trajimos a Deportes Temuco (Unión Temuco en ese tiempo) y después O´Higgins y un equipo de Colina (que debe ganar un torneo interno para viajar y participar)", manifestó.
Mayne Nicholls agradeció el respaldo que recibió durante el proceso. "Regreso a lo que ha sido la pasión de mi vida, lleno de satisfacciones. Son muchos, muchísimos los que me testimoniaron su alegría cuando supieron que el castigo había expirado. Incluso aquí en Europa se me ha acercado gente que no conocía a decirme que supo del caso y le costaba creer lo severo de la sanción en mi contra. No puedo negar que todo el suceso me afectó. Primero en lo emocional. También en lo financiero. Un error ingenuo no puede ser sancionado con penas más severas que grandes casos de corrupción dentro de la FIFA. El Tribunal de Ética de la FIFA elaboró una tesis que se caía sola, pero que no evaluó en forma ecuánime: la de haber recibido beneficios y regalos. No hubo ninguno, como lo dejó claramente establecido el TAS", detalló.
Sus críticas hacia el organismo afincado en Zúrich. "Y actuaron de forma brutal. Lisa y llanamente me trataron como a un criminal. Tal es así, que en la sesión con el Tribunal ni siquiera me dejaron salir a caminar por los bosques aledaños a la FIFA. Mientras almorzaban (yo no tenía apetito) simplemente me encerraron en una sala. Deben haber creído que me iba a fugar", relató.