Al menos 500.000 ovejas murieron en la provincia de Chubut, en el sur de Argentina, por la acumulación de gruesas capas de ceniza procedentes del complejo volcánico Puyehue-Cordón Caulle, confirmaron hoy fuentes oficiales.

De las 600 mil cabezas de ganado que quedan con vida, hay unas 50.000 en "grave riesgo", dijo a las radios locales el jefe del gabinete del gobierno de Chubut, Pablo Korn, luego de lamentar de que dicha provincia no ha recibido la ayuda prometida por las autoridades centrales.

Korn señaló que el gobierno federal ha enviado sólo 50.000 tapabocas para proteger a la población de zonas urbanas y rurales a las que han llegado nubes de cenizas volcánicas, cuya acumulación mata de hambre y sed a las ovejas.

"Los pequeños productores recibieron sólo muy poco forraje para sus animales", aseguró el presidente de la Federación de Sociedades Rurales de Chubut, Ernesto Siguero.

CENIZAS
La emanación de cenizas del complejo volcánico, que entró en actividad el 4 de junio, obligó a declarar "zona de desastre" a las localidades de Chubut y de Río Negro y Neuquén, en la Patagonia argentina.

Según Haroldo Lebed, secretario de Emergencia y Desastre Agropecuario del ministerio de Agricultura y Ganadería, en Río Negro las cenizas amenazan a 600.000 cabezas de ganado, la mayor parte ovino, propiedad de unos 3.000 productores.

"Hay unas 300.000 cabezas de ganado que están en un grado importante de riesgo. Los animales comen pasto con cenizas, se les rompen los dientes y se intoxican", comentó a emisoras de radio de Buenos Aires luego de recorrer todas las localidades afectadas.

La autoridad argentina aseguró que la situación más grave se vive en la localidad de Ingeniero Jacobacci, en Río Negro, "que quedó tapada por arena volcánica, que es más gruesa y pesada que las cenizas".

COMPLEJO VOLCANICO
El lunes pasado, miles de pobladores de Bariloche salieron a las calles para retirar gruesas capas de ceniza proveniente del complejo volcánico.

Fuentes del Servicio Meteorológico de Argentina informaron hoy de que el cordón Caulle ha comenzado a expulsar lava mientras que las nubes de cenizas han vuelto a ser impulsadas por el viento hacia este país.

Ayer, el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), confirmó también la caída de lava en el complejo volcánico.

"La actividad sísmica continuó relacionada con una dinámica de conducto abierto, asociada con la salida de gases y el ascenso del cuerpo magmático. Aunque no se realizaron nuevas observaciones aéreas, se infiere que la efusión de lava continúa, con base en el registro de los pulsos de tremor de alta intensidad. Las posibilidades de un evento explosivo aún permanecen, debido a posibles obstrucciones del conducto por la lava emitida y/o cambios en la dinámica de la erupción", consigna el organismo.

Mientras que aún se reporta caída de cenizas finas en Riñinahue, Llifen, Futrono, Villarrica y Pucón. Esta columna eruptiva se dirige hacia el noreste alcanzando alturas del orden de 3-4 km.
En las horas de la mañana se reportó caída de cenizas finas en las poblaciones de Riñinahue, Llifen, Futrono, Villarrica y Pucón.

Por lo demás, confirmó que continúa vigente la amenaza de generación de flujos piroclásticos. "En consecuencia, se resalta la peligrosidad que implica la cercanía al curso superior del valle del río Nilahue y río Contrafuerte por la ocurrencia de estos fenómenos, especialmente en la zona aguas arriba del puente La Mula y sector Quirrasco", consignan.

De esa manera, el proceso eruptivo continúa "y es posible que vuelva a presentarse un incremento en la actividad. Por lo tanto se conserva en el nivel de alerta volcánica en Rojo".

En Argentina, en tanto, los vuelos comerciales entre Buenos Aires y ciudades del sur del país, suspendidos a comienzos de mes, comenzaron a reanudarse hoy con vistas a restablecerlos completamente este jueves mientras se mantiene el alerta por las actividades del volcán.