El presidente ruso Dimitri Medvedev negó los rumores de una profunda ruptura entre él y el primer ministro Vladimir Putin en comentarios publicados el lunes, e insinuó repetidamente que no competirían entre ambos por la presidencia el próximo año.
"Creer que una cierta división se está profundizando entre nosotros es totalmente errónea", añadió, según una transcripción del Kremlin.
En una entrevista con el Financial Times, también dijo que esperaba que Barack Obama, que ha ayudado a mejorar las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, ganase las elecciones del próximo año para lograr un nuevo periodo como presidente de Estados Unidos .
Medvedev, que llegó al poder apoyado por Putin en el 2008 cuando a este se le prohibió un tercer mandato consecutivo, ha criticado sutilmente a su predecesor y enfatizado la necesidad de un cambio, alimentando las especulaciones sobre una creciente discordia antes de las elecciones de marzo del 2012.
En lo que muchos inversores vieron como un discurso de campaña el viernes, Medvedev advirtió contra la autocracia y apuntó que la estabilidad rusa de la que alardea Putin podría llevar a un estancamiento. Pero en la entrevista del Financial Times realizada al día siguiente, Medvedev afirmó que él y Putin eran "personas distintas", con ideas distintas sobre cómo llegar a algunos objetivos, pero que estaban del mismo lado.