El Presidente ruso, Dmitri Medvedev, emitió un decreto para recortar en un 20% el personal del Ministerio del Interior el primero de enero de 2012.

Lo informó la agencia de prensa Interfax, según la cual el decreto incluye el cierre de dos departamentos, introducir el principio de la rotación para la lista de los cuadros dirigenciales de la policía y rever los criterios de selección de los candidatos dando más espacio a las cualidades psicológicas y morales.

Actualmente los empleados del ministerio del Interior son 1,4 millones y en actuación del decreto podrían ser despedidas unas 280.000 personas.

El presidente ordenó también racionalizar la estructura del ministerio para evitar duplicados y distribuir mejor poderes y funciones, así como elaborar medidas anticorrupción.

Medvedev había preanunciadoel decreto en una entrevista televisiva en directo para hacer un balance de fin de año.

La policía, siempre acusada de corrupción y abusos de varios tipos, entró en el ojo del ciclón en particular este año, con una serie de episodios increíbles.

Entre ellos se encuentra la de un agente que provocó un estrago tras festejar su cumpleaños, un investigador que mató a una persona durante un interrogatorio, una patrulla ebria que cambió la plaza Roja por una pista de Fórmula 1 y agentes especiales condenados por un homicidio, entre otros.