Si los niños son el futuro de un país, el de Chile no es muy alentador. Según el informe del Instituto para la Métrica de Salud y Evaluación de la U. de Washington (IHME) Chile es el quinto país del mundo con mayor cantidad de menores de 19 años con exceso de peso, por sobre EE.UU. y México y el décimo si se considera sólo a los menores con obesidad.

En general, entre los 195 países en que se realizó el estudio, no hubo diferencias por género entre los niños y jóvenes obesos, pero se evidenció que a partir de los 14 años, es cuando más comienza a aumentar la obesidad en ambos grupos.

Andrea Huidobro, especialista en nutrición y colaboradora del Centro Avanzado de enfermedades Crónicas (Accdis), cree que este es el verdadero problema de Chile. "Estos niños tienen más riesgo de ser adultos obesos y de presentar enfermedades crónicas como hipertensión arterial, diabetes o enfermedad cardiovascular, sin mencionar los problemas psicológicos y sociales a los que están expuestos", señala la experta.

Para Marcia Erazo, académica de la U. de Chile, es urgente actuar ahora en este grupo y no esperar 20 o 30 años más, cuando ya estén enfermos de diabetes o muriendo de un infarto agudo al miocardio. "Mientras antes logremos controlar el exceso de peso, mejor expectativa de vida y menos años de vida perdidos tendrán estos niños. Será una población con mejor calidad de vida en general si se interviene hoy", dice la especialista.

¿Qué se puede hacer? "Se requieren medidas estructurales y poblacionales que influyan en el ambiente. No se trata sólo de aumentar impuestos a las bebidas, sino también de un subsidio a las frutas y verduras en aquella población más vulnerable", indica como ejemplo Daniela Godoy, académica de la U. Mayor. Las intervenciones deben ser en todos los ámbitos para que afectar el ambiente de su casa, pero también del colegio y del barrio.