Un estudio desarrollado por investigadores canadienses de la Universidad de Alberta, sugiere que los niños que son buenos en ortografía con palabras "reales", son también buenos en la otografía en los mensajes de texto.

La profesora Connie Varnhagen, quien dirigió la investigación, señaló que "asimismo, los niños que tienen una pobre ortografía en las clases, también tienen una pobre ortografía en los mensajes de texto".

El estudio mostro, también, que los niños que envían mensajes de texto, están usando muchas nuevas palabras inventadas. Una de las investigadoreas, Nicole Pugh, dijo: "hemos tenido que decifrar el significado del lenguaje con diccionarios en internet o pedirle ayuda a nuestros hermanos menores".

La profesora Varnhagen comparó el uso de este nuevo tipo de lenguaje con un pequeño ejercitamiento cerebral, diciendo que esto requiere más concentración y atención que simplemente leer un texto.

BUENA SEÑAL
El estudio analizó a cerca de 40 estudiantes de entre 12 y 17 años. A éstos se les pidió que guardaran sus mensajes de texto por una semana. Al final de la semana se les pidió que rinideran un test de otrografía.

Aunque el estudio es pequeño, no es el primero que grafica la conclusión de que los mensajes de texto no son perjudiciales para los niños.

En 2009, un reporte del diario Británico de Psicología del Desarrollo, señaló que los estudiantes que envían mensajes de texto regularmente, tienen un mejor vocabulario y una mejor comprensión de lectura que sus compañeros. Similar al estudio de la U. de Toronto de 2006, que indicaba que los mensajes de texto, que son similares al texto hablado, no afectan las habilidades escritoras de manera significativa.

APLICACIÓN EDUCATIVA
Los investigadores sugieren que estas conclusiones deberían conducir a una disminución de la preocupación por el uso de los mensajes de texto, e indicar a los educadores que tal vez deberían empezar a pensar de manera en que el nuevo lenguaje se pueda utilizar educativamente.

La profesora Varnhagen señaló que "si quieren estudiantes que piensen en forma precisa y concisa, y que sean capaces de expresarse por sí mismos, podría ser interesante tenerlos escribiendo mensajes de texto con sus ideas, tal vez esto les permitiría la posibilidad de usar más este nuevo dialecto en sus informes breves o en actividades entretenidas".

"Usar un nuevo tipo de lenguaje requiere concentración, además, traducirlo a un lenguaje estándar requiere concentración y atención. Este es un pequeño ekjercicio cerebral", señaló.