"Sabemos que existe aún un FUT muy grande, que nunca se va a sacar si no es con estos incentivos. Nunca se va a pagar", fue la principal conclusión del ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, consultado respecto al futuro del Fondo de Utilidades Tributables que se mantiene "congelado" a partir de enero de este año, dado el estreno de los nuevos sistemas atribuido y semi integrado.

De esta manera, el Secretario de Estado explicó el pasado lunes en el ex Congreso de Santiago que se considera "seriamente" reabrir el beneficio transitorio que se estableció para que los contribuyentes paguen estas utilidades no retiradas, las que al cierre de 2015 (último dato conocido) alcanzaban los US$ 366 mil millones, superando 1,55 veces el PIB de Chile.

Marcelo Schilling, diputado PS y miembro de la Comisión Especial Mixta de Presupuesto, es uno de los que ha insistido al ministro Valdés -en reiteradas ocasiones- que es necesario reinstalar la tasa preferencial para que las empresas paguen el FUT acumulado, recordando que el Impuesto Sustitutivo (ISFUT), que dejó de operar a fines de abril, recaudó en torno a los US$ 2 mil millones. "Se supone que la postergación del pago por retiro de la utilidades no era hasta el final de los tiempos", remarcó Schilling, pidiendo asumir una "política de estímulo más agresiva" para alcanzar "la recaudación potencial" del FUT restante.

De esta manera, el anuncio que realizó el ministro la semana pasada, y sobre el que podría ahondar en la sesión de mañana de la Comisión Mixta de Presupuesto, encontró un importante apoyo de parte de asesores del área en el sector privado, quienes plantearon que muchos contribuyentes no alcanzaron a hacer uso en su momento del mecanismo transitorio.

En este sentido, Claudio Bustos, abogado y socio de Bustos Tax & Legal, planteó que "hubo muchos contribuyentes que se enteraron tarde de la franquicia tributaria, y no alcanzaron a declarar el FUT bajo el mecanismo que estuvo vigente hasta abril este año", y aseguró que "para los contribuyentes, se trata de una muy buena noticia". Con esto, Bustos sostuvo que si el beneficio tributario fuera similar al del mecanismo anterior, es decir, una tasa preferencial del 8% para el retiro, o la aplicación de la tasa promedio ponderada de los socios personas naturales, es razonable pensar que existirá un gran número de contribuyentes que querrá acogerse".

El interés por acceder nuevamente al mecanismo fue confirmado por Patricio Gana, socio principal de AK Contadores, quien calificó lo señalado por Valdés como un "gran acierto", siendo una medida "que el mercado viene solicitando desde hace ya un tiempo". Además, Gana agregó que "sería importante complementar esta acción con una campaña comunicacional del SII que sea más activa".

Por su parte, Germán Campos, socio del departamento Legal y Tributario de PwC Chile, planteó que"la propuesta puede ser positiva, dada la alta demanda que hubo para el último proceso".

Riesgo por recaudación

De acuerdo a Javier Jaque, socio de Consultoría Tributaria de EY, si bien la medida favorece al sector privado, desde el punto de vista del Fisco la aplicación de la tasa preferencial para el pago del FUT histórico es perjudicial.

"Yo al menos tengo una visión crítica desde una posición de beneficio para el país", recalcó el abogado, explicando que "el ISFUT recaudó recursos para hoy, pero hipoteca la recaudación futura. Si hoy se paga por el FUT, eso pasa a ser dinero no tributable (FUNT), por lo que los próximos años no tendremos recaudación por el Impuesto Global Complementario (ICG)". Así afirmó que "las empresas retirarán las utilidades que sean menos gravosas, por lo que se irá acumulando el nuevo Registro de Rentas Afectas al ICG".

Coincidió en este sentido Bustos, advirtiendo que "este mecanismo implica una mayor recaudación en lo inmediato, pero también reducir la recaudación de años posteriores. Desde el punto de vista fiscal, es un arma de doble filo".