El pesimismo se adueñó de las bolsas de Asia en la sesión de este viernes, en una jornada marcada por pérdidas generalizadas originadas por los problemas financieros de Dubai, que ayer solicitó la moratoria de una deuda de US$4.000 millones.
Las acciones bancarias son las más perjudicadas en vistas de temores sobre la liquidez de los bancos del continente.
Sólo se salvaron las plazas del sudeste del continente que no abrieron sus puertas, al ser hoy un festivo islámico.
En Tokio el Nikkei cayó 301,72 puntos, o un 3,21%, hasta situarse en los 9.081,52 puntos. El Topix, por su parte, cedió 18,55 puntos, un 2,23%, hasta los 811,01.
En Seúl el Kospi se desplomó 75,02 puntos (4,69%) y concluyó la sesión en las 1.524,50 unidades. El indicador de valores tecnológicos Kosdaq perdió 22,15 puntos (4,67%) hasta colocarse en los 451,67 puntos.
En Shanghai el índice general cayó el 2,36%, para concluir su cotización en 3.096,27 puntos, 74,72 puntos por debajo del cierre de ayer.
El mercado bursátil de Hong Kong cerró con un descenso del 4,84%, después de que el índice referencial Hang Seng bajara 1.075,91 puntos hasta los 21.134,50 enteros.
La Bolsa de Valores de Bangkok cedió 5,36 puntos, equivalentes a un 0,78%, y el índice SET quedó situado en los 680,34.
Las plazas financieras de Kuala Lumpur y de Singapur permanecieron cerradas hoy por la fiesta musulmana del sacrificio del cordero.