Los mercados emergentes desde Brasil hasta India toman medidas para frenar la salida de capital en tanto crece el temor a que los países desarrollados se acerquen al principio del fin de una era de inyección de liquidez sin precedentes.

El banco central de India vendió dólares en los dos últimos días para detener la caída de la rupia, dijeron dos personas familiarizadas con el tema. Brasil dijo ayer que revertiría algunos de los controles de capital que empezó a instrumentar en 2010, cuando la Reserva Federal de los Estados Unidos iniciaba su segunda ronda de flexibilización cuantitativa, o QE2. Tailandia también vendió dólares en la última semana.


Las medidas siguen a la decisión de esta semana del Banco de Japón de abstenerse de incorporar estímulo a pesar de una declinación de las acciones del país que podría afectar su campaña de reanimación del crecimiento. El índice bursátil MSCI Emerging Markets ha declinado 10% desde que el presidente de la Fed, Ben S. Bernanke, dijera el 22 de mayo que la Reserva Federal podría reducir la compra de activos si considera que hay una mejora económica sostenida.

"La gente se lleva el dinero de dondequiera haya ganado la mayor cantidad", dijo Tim Condon, jefe de análisis para Asia en Singapur de ING Groep NV, que trabajó antes para el Banco Mundial.

"Los mercados adaptan los precios a lo que se observaría en una normalización de los rendimientos de los bonos del Tesoro de los Estados Unidos, y todo lo que los bancos centrales pueden hacer ahora es cerrar las compuertas. No se ha llegado al fin de esta volatilidad".

Llave cerrada

Tres años después de que las autoridades de mercados emergentes desde Brasil hasta Corea del Sur advirtieran sobre una desestabilización producto del estímulo récord de la Fed, ahora deben hacer frente a la perspectiva de que se cierre la llave.

El gobierno brasileño dijo ayer que eliminará un impuesto a los derivados cambiarios en un intento de detener la declinación del real, que está en el nivel más bajo en cuatro años. El impuesto de 1% se había aplicado a las apuestas contra el dólar en el mercado de futuros del país a los efectos de debilitar la moneda de Brasil.

El ministro de Hacienda, Guido Mantega, ya había anunciado el 4 de junio la eliminación de un impuesto de 6% a la inversión extranjera en bonos comprados en el mercado brasileño.

El gobernador del banco central de Turquía, Erdem Basci, dijo ayer que la preocupación respecto de una reducción de las compras de activos por parte de la Fed ha generado una importante tensión en el mercado y ha hecho subir los rendimientos de los bonos en el mundo.

Su par tailandés, Prasarn Trairatvorakul, dijo hoy que una liquidación de las acciones de su país no constituye una sorpresa dado un aumento anterior. Dijo a la prensa en Bangkok que Tailandia vendió dólares en el transcurso de la última semana para moderar la volatilidad del baht.

"Los mercados emergentes instrumentaron en un primer momento medidas para limitar el ingreso de capital, y ahora que las monedas se debilitan y les generan preocupación respecto del financiamiento de la cuenta corriente, es por completo natural que (esas medidas) ya no cubran las necesidades de las autoridades", dio Richard Jerram, economista jefe de Bank of Singapore Ltd., que lleva dos décadas analizando las economías asiáticas.

"Sus preocupaciones económicas han cambiado, sus prioridades han cambiado, de modo que los cambios de política tienen sentido", agregó.