La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, dijo este viernes que el Mercosur está listo para presentar en enero su oferta comercial a la Unión Europea, en medio de negociaciones sobre un acuerdo entre ambos bloques.

"Debemos buscar elevar nuestro comercio a un nuevo nivel, tanto en términos de cantidad como de equilibrio", dijo Rousseff en el Encuentro Económico Franco-Brasileño, en la Federación de Industrias del Estados de Sao Paulo, en la que participó el presidente francés, François Hollande.

"Tenemos excelentes oportunidades por delante, el avance de las negociaciones comerciales entre Mercosur y la Unión Europea es uno de ellas", aseguró Rousseff.

"Brasil y el Mercosur ya están listos para realizar una oferta comercial, esperamos que el intercambio de ofertas se realice en enero", agregó.

Ante un público compuesto principalmente por empresarios, Rousseff aseguró que la situación económica de Brasil es sólida y que la nación "es y continuará siendo una opción segura y atrayente para los inversionistas de cualquier país".

"Los fundamentos macroeconómicos brasileños son sólidos. Nuestro endeudamiento líquido permanece bajo, en torno al 35% del PIB. Nuestras reservas internacionales equivalen a US$376.000 millones. Mantenemos nuestro compromiso con la estabilidad y el control de la inflación, que terminará el 2013 dentro de la meta por décimo año consecutivo", dijo.

La presidenta dijo también que el país mantiene una rigurosa disciplina fiscal y está empeñado en mejorar la calidad del gasto público. Reiteró que Brasil se incluye entre los tres países del G-20 con resultados positivos en materia de superávit este año.

Rousseff también habló sobre la crisis económica mundial y afirmó que la única manera de superarla es por medio de estímulos para la economía.

"Una superación plena de la crisis económica de los últimos años solamente se alcanzará con medidas que estimulen la economía, promuevan la generación de empleo, aumenten los salarios y fomenten el comercio internacional en bases equilibradas y en beneficio de todos los países", afirmó.

Hollande, en tanto, calificó a Europa como "primera potencia económica", dijo que el continente debe volcarse hacia América Latina y defendió la inversión como un salvavidas para la economía.