La cumbre del G20 en Toronto consiguió ponerse de acuerdo en un objetivo concreto: reducir el déficit público, dijo hoy en Toronto la canciller alemana Angela Merkel.
Según la Jefa de Estado alemán, antes de 2013 el déficit de los países industrializados tiene que reducirse a la mitad.
"Eso será parte del documento final", afirmó Merkel en declaraciones previas a la firma del documento de la cumbre.
Las declaraciones realizadas hoy por Merkel señalan que se han encontrado una fórmula intermedia, entre los países que abogaban por un impulso al crecimiento y la reducción del déficit, dejando fuera de la austeridad fiscal a los países emergentes.
"Honestamente, es más de lo que esperaba, porque es muy específico y fue aceptado por todas las naciones industrializadas", agregó la canciller alemana, que calificó el compromiso como un "éxito".
Con todo, de aprobarse el último de los borradores de la declaración final, los países industrializados hacen una leve mención a los temores de los emergentes.
"Debemos considerar el impacto de nuestras acciones en los países de ingresos bajos", indica el proyecto de declaración. "Seguiremos apoyando la financiación al desarrollo, también mediante nuevos enfoques que alienten la financiación al desarrollo de fuentes públicas y privadas", agrega el texto.
Asimismo, el documento llama a los miembros del G20 a garantizar que cualquier recorte presupuestario "no dañe el crecimiento". Además, señala que las acciones, si bien "concertadas", deben ser "diferenciadas y ajustadas a las circunstancias nacionales".
Merkel consideró que el G20 todavía necesita adaptarse a su flamante papel como foro coordinador de las decisiones económicas globales y que los países tienen que encontrar una vía "diferenciada" para cada uno aunque con el objetivo común en mente.
"Como G20 vamos a tener que crecer paso a paso", señaló la canciller germana. "Tendremos similares pero a la vez diferentes responsabilidades, como con el cambio climático, donde decimos que si bien somos todos responsables del destino del mundo a la par tenemos responsabilidades distintas, y así lo comprenden los países emergentes", aseguró.
DIFERENCIAS
El Grupo de los Veinte (G20) celebra hoy su reunión plenaria en Toronto con visibles diferencias entre sus miembros en asuntos como el gasto público y la propuesta para imponer impuestos a la banca.
Los miembros el grupo integrado por los principales países desarrollados y en desarrollo, que se ha erigido como principal guardián de la economía global, concuerdan en la necesidad de recortar el déficit y la deuda, pero discrepan en el monto y la velocidad de los recortes.
Otras diferencias, como la propuesta para imponer impuestos a la banca con los que financiar potenciales rescates futuros del sector, prometen desatar un fuerte debate entre los gobernantes.