La canciller alemana, Angela Merkel, sufrió hoy por un mínimo margen una derrota en las elecciones regionales de Baja Sajonia, consideradas una prueba importante de cara a los comicios generales de septiembre, en los que aspira a un tercer mandato.
La Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Merkel y su socio del Partido Liberal (FDP) fueron superados en tan solo un escaño por los opositores del Partido Socialdemócrata y Los Verdes y probablemente pierdan el gobierno de este "Land" del noroeste alemán que ostentaban desde hace casi una década.
Según coinciden las proyecciones de las principales televisoras, que durante horas dieron un empate técnico, la centroizquierda obtuvo 69 mandatos mientras que la centroderecha de Merkel recabó 68.
El candidato socialdemócrata al gobierno, el alcalde de Hannover, Stephan Weil, anunció la intención de entablar negociaciones con Los Verdes para formar una alianza gubernamental.
"Tal y como están los resultados, es lo que tengo pensado hacer", dijo Weil tras una de las citas electorales más reñidas de los últimos tiempos en Alemania.
La CDU de Merkel obtuvo uno de sus peores resultados en esta región, un 36 por ciento, pero se erigió en primera fuerza, al tiempo que su socio, el Partido Liberal, se convirtió en la gran sorpresa al remontar desde el tres por ciento en la intención de voto hace pocas semanas a 9,9 por ciento.
Los analistas atribuyeron la espectacular recuperación a un trasvase de votos conservadores que buscaban rescatar al socio menor para mantener en el poder a la coalición de centroderecha al mando del democristiano David McAllister.
Después de horas de espera, las aritméticas electorales dieron la mayoría a la centroizquierda. El Partido Socialdemócrata reunió un 32,6 por ciento y mejoró en más de dos puntos su resultado anterior, pero el principal impulso emanó de Los Verdes, que se alzaron con 13,7 por ciento de los votos, el mejor resultado en este estado jamás obtenido por los ecopacifistas.
El Partido de la Izquierda y el Partido Pirata no obtuvieron el mínimo de cinco por ciento necesario para la representación parlamentaria.
El resultado conseguido por los liberales supone un respiro para el presidente del partido y vicecanciller, Philipp Rösler, muy cuestionado en sus propias filas por la caída en las preferencias electorales.
La victoria para la centroziquierda brindará un fuerte impulso a los socialdemócratas, que han caído a los niveles más bajos en la intención de voto por los tropiezos que acompañaron el comienzo de campaña de su candidato a canciller, el ex ministro de Finanzas Peer Steinbrück.
El candidato socialdemócrata generó una polémica tras otra desde que fue elegido como contrincante de Merkel. Sus abultados honorarios como disertador o sus quejas de que el sueldo de jefe de gobierno no es lo suficientemente alto hicieron caer en picada su popularidad y perjudicaron la campaña en Baja Sajonia.
Unos 6,1 millones de electores fueron llamados a las urnas en este "Land", el segundo mayor en superficie y patria chica del gigante automotor Volkswagen.