La canciller de Alemania, Angela Merkel, y el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, se reunieron hoy en la sede de la cancillería germana en Berlín para analizar la situación de la crisis de la deuda soberana europea y aunar posturas de cara a la próxima cumbre europea que se realizará a finales de enero en Bruselas.
Los mandatarios también analizaron las vías para impulsar el crecimiento y el empleo en Europa. En la reunión de dos horas, los líderes de las dos mayores economías de la eurozona probablemente abordaron los planes de Sarkozy de introducir por cuenta propia un impuesto a las transacciones financieras.
El gobierno alemán dejó claro días antes que no ve con buenos ojos las medidas en solitario y aboga por una acción concertada en toda la Unión Europea.
Asimismo, hablarán sobre la puesta en práctica del "pacto fiscal" para el control del gasto público que aceptaron en la última eurocumbre los miembros de la Unión Europea con excepción del Reino Unido.
Esta es la primera de tres reuniones que celebrará Merkel esta semana en torno a la crisis de la deuda europea. La canciller recibirá mañana martes a última hora de la tarde a la directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, y será anfitriona el miércoles del primer ministro interino de Italia, Mario Monti.