El miércoles pasado se cumplió un mes desde que Joane Florvil falleciera producto de una falla multisistémica en el Hospital Clínico de la Universidad Católica. Pese a que la investigación que lleva adelante el Ministerio Público para dilucidar las causas del deceso de la joven -detenida en un confuso incidente por presunto abandono de su hija- continúa, los restos de la mujer haitiana aún permanecen a la espera de ser retirados en el Servicio Médico Legal (SML) de Santiago.
El 30 de septiembre, día en que muere la joven y su cuerpo es ingresado a la institución forense para la autopsia, la Fiscalía Centro Norte emitió un oficio, en el cual junto al listado de estudios requeridos para la investigación se permitía -una vez terminados estos- la entrega del cuerpo a quien lo solicitase. El 12 de octubre, un nuevo oficio reiteró la petición, aunque especificó que los
restos solo podrían ser entregados a la pareja de Florvil, Wilfred Fidele.
Pese a que en un momento existió la posibilidad de un entierro en Chile, finalmente primó el pedido de los padres de Joane, la que será sepultada en su país natal, donde sus cercanos pretenden realizar ceremonias a nivel nacional para exponer su caso más allá de las fronteras de Chile.
Y si bien en el SML aseveran que los procedimientos se encuentran cumplidos, la familia explica que aún no poseen los recursos para concretar el traslado del cuerpo hasta la isla, situación que los ha llevado a solicitar ayuda.
"Estamos revisando con el gobierno de Haití qué proceso usaremos para repatriar el cuerpo de Joane a Haití", señaló Realyno Florvil, hermano mayor de la mujer.
Desde la Fundación Frè, entidad que ha asesorado a los familiares desde la detención de la joven, el 30 de agosto, su director ejecutivo, José María del Pino, aseguró que diversas organizaciones "contemplan una despedida masiva durante su trayecto al aeropuerto".
Investigación
Otra de las inquietudes que complican a la familia es el desconocimiento sobre los resultados de la autopsia.
Tras las dudas que dicen tener por una presunta negligencia en la ex Posta Central, desde donde indican que Joane salió con muerte cerebral, se suma un posible maltrato durante su estadía en la 44 Comisaría de Lo Prado. Esto, de acuerdo a la versión relatada por el director del recinto en la Comisión de DD.HH. de la Cámara de Diputados.
"Toda mi familia tiene mucho problema por ese asunto. Tras tanto tiempo todavía no tengo la información de la autopsia", increpó Realyno, en tanto consideró que el caso de Joane dejó de ser para él un asunto familiar. "A esta altura no sólo defiendo a Joane, defiendo mi bandera, mi país y mi raza haitiana, que es víctima de todo tipo de racismo acá en Chile", dijo.
La familia aún no presenta una querella por la muerte, aunque advirtió que se encuentra reuniendo los antecedentes y que el trámite sería realizado durante noviembre.