En agosto de 2006 fue la última vez que la DC convocó a un congreso programático para discutir los "principios" de la colectividad. Hoy, a 11 años del encuentro y en medio de la crisis instalada en el partido por los magros resultados de las elecciones presidenciales y parlamentarias, la nueva directiva interina propondrá realizar una nueva edición de la cita.
Desde la mesa indican que hace cuatro años se determinó que la colectividad debía comenzar un nuevo "estado de congreso". Sin embargo, debido a decisiones internas, nunca se concretó. En parte, explican, debido a las diferencias programáticas que existen al interior de la Democracia Cristiana, entre aquellos que se sienten más proclives a ideas conservadoras, en contraste de quienes defienden las ideas propias del mundo de la centroizquierda.
En medio de este escenario, la presidenta interina de la DC, Myriam Verdugo, hizo un llamado a fijar una fecha a corto plazo para impulsar la convocatoria a un nuevo congreso programático. "Vamos a tratar de tener el respaldo del partido para volver a impulsar este proceso programático que se requiere", apuntó.
Proceso preparatorio
De acordarse la convocatoria, en los próximos meses podría iniciarse el proceso preparatorio al cónclave, denominado "estado de congreso" y el que se puede alargar por hasta unos seis meses, y que estará a cargo de un grupo de militantes denominado "congresistas".
Cada uno de ellos será elegido democráticamente -en representación de cada una de las regiones del país- y quienes, por lo general, representan también a las distintas facciones que conviven en la colectividad.
Una vez que termine el proceso de recolección de información en las distintas regiones, se crearán comisiones temáticas para comenzar a definir las posturas oficiales que tendrá la colectividad respecto de materias como aborto; matrimonio igualitario; educación; salud y nueva Constitución. En ese sentido, no se descarta una modificación de la declaración de principios del partido.
El tema, no obstante, comentan en la tienda, aún no está resuelto. Miembros del consejo nacional ven con preocupación que de abrir un proceso de discusión sobre los principios de la colectividad puede dar pie a un nuevo flanco interno, debido a las diferencias que existen entre los sectores más conservadores y más liberales del partido.