La imagen de la pasada Teletón se repite. Heavysaurios, una banda argentina conformada por cinco músicos disfrazados de criaturas jurásicas (aunque en estricto rigor uno es un dragón), toma el escenario, esta vez del Kidzapalooza, y lo que sigue es una bizarra mezcla de mensajes infantiles y metal virtuoso, con solos de guitarra veloces y cabeceos de por medio. "Somos dinosaurios, y no nos van a callar", aullaba en el primer tema el cantante Mr. Heavysaurio, manifestando una curiosa rebeldía. "Les vamos a enseñar todos los secretos de un concierto de rock", dijo el vocalista, procediendo a pedirle a los niños hacer con las manos "los cuernitos", gesto clásico de recitales de música pesada, aunque, esta vez, sin la connotación satánica que le daba Ronnie James Dio. El público infantil procedió a hacer caso, mientras más de un grande soltaba una carcajada con la imagen que se generó.
Hacia el final, tras 45 minutos, el tema La goma de mascar de Sofi fue dedicada a Matías Torres, el niño símbolo de la Teletón 2015, presente en el Parque O'Higgins ayer, para luego terminar con la suerte de "hit", Quiero leche. Las referencias a la música de Jurassic Park cerca del final pueden haber sido demasiado antiguas para los más pequeños, pero de nuevo, los adultos parecieron gozar tanto o más que los niños.
