Aglomeraciones de personas en los paraderos de Vicuña Mackenna -que no se veían desde el inicio del Transantiago en 2007- fueron las primeras imágenes con que muchos se encontraron esta mañana y que seguramente se repetirán durante la hora peak de la tarde ¿La razón? La suspensión del servicio del Metro en cinco estaciones de la Línea 4, ocasionó el colapso del principal sistema de locomoción que los habitantes de Santiago ocupan para trasladarse.
La detección de una fisura en uno de los rieles cerca de la estación Quilín, obligó a la empresa a suspender los servicios entre el tramo de Grecia y Vicente Valdés. Equipos ya trabajan en el lugar para arreglar la falla y restablecer el sistema completo durante la jornada de mañana.
Tras esto, el ministro de Transportes, Andrés Gómez Lobo, reconoció que "hay que mejorar los procedimientos para actuar con mayor celeridad", porque "una ciudad del tamaño de Santiago no puede depender de un sólo sistema de transporte".
Y aunque el gobierno hizo pública su voluntad de optimizar este ítem, son los usuarios los que hoy sufren las consecuencias de un sistema de transporte que, pese a ser el más eficiente y rápido, también
es uno de los más "frágiles", indican los expertos.
DEPENDENCIA POR FALTA DE ALTERNATIVAS
Para el arquitecto y magíster en Desarrollo Urbano UC, Iván Poduje, "el Metro es un sistema que está muy estresado y que está funcionando en varios puntos al límite porque tiene mucha demanda. Si es que hay una falla, aunque sea la más mínima, el sistema completo presentará consecuencias, y si hay que arreglarla -como el caso de la fisura detectada- mayor será el impacto. Hay que recordar que el tren subterráneo es la columna vertebral de Santiago y esto puede generar efectos colaterales significativos si es que sufre alguna caída", explicó el especialista a La Tercera.
Por su parte, el ingeniero civil y experto en Transporte sustentable de la U. Mayor, Hernán Silva, señaló a este medio que los colapsos que el Metro sufre ante cualquier irregularidad, también se deben a que "hay pocas o nulas alternativas anexas".
El experto explicó que una de las razones que hacen que este sistema sea tan importante para los capitalinos es que "cuando se implementó el Transantiago se eliminaron casi todos los recorridos que iban a la par con las líneas de Metro; por eso los que necesitaban esos recorridos largos se vieron en la obligación de bajar al Metro, por lo tanto para muchos se ha transformado en la única alternativa", puntualizó.
Según Silva, una de las formas en que se podría descongestionar el tren subterráneo es
implementando recorridos de buses en la superficie que sigan los mismos tramos
, como una segunda opción para los usuarios. Sin embargo, aclaró, que para logar la efectividad de este proceso también es fundamental reforzar otras alternativas, entre ellas el uso de bicicletas públicas y ciclovías.
Algo parecido señaló Poduje al manifestar que "el Metro es el único sistema que tiene inmunidad de congestión". Esa es la razón que hace que las personas lo tomen como la principal vía a la hora de viajar dentro de la ciudad.
Pese a ello, el experto enfatizó que éste y los futuros gobiernos deben preocuparse de estimular el transporte por tierra, "construyendo mejores corredores para buses y sistemas complementarios que entreguen más opciones para realizar viajes cómodos y en poco tiempo", concluyó.