El subsecretario de Relaciones Exteriores mexicano Juan Manuel Gómez Robledo rebatió el miércoles en París las críticas a  la gestión del gobierno tras la desaparición de 43 estudiantes y defendió que  éste actuó con "absoluta transparencia".

"El gobierno ha respondido con apertura, absoluta transparencia y una contundencia que no se hubiera visto hace algunos años apenas", afirmó Gómez  Robledo, encargado en la cancillería de la cartera de Derechos Humanos.

Ante las críticas de que el gobierno mexicano respondió de forma tardía a la crisis, el alto funcionario mexicano dijo que esta cuestión formará parte de  la investigación liderada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos  (CIDH).

El subsecretario de Relaciones Exteriores destacó que el gobierno tiene previsto firmar este miércoles en la capital mexicana el acuerdo de  colaboración con la CIDH, que enviará expertos independientes. 

En el marco de la investigación penal mexicana, la Comisión "va a poder promover denuncias penales o impugnar decisiones" que hubiera tomado el gobierno durante la investigación, destacó.

"Es un acuerdo importante cuyo propósito es transparentar y garantizar la  credibilidad de las investigaciones que ha llevado a cabo el Estado", añadió.

La desaparición, el 26 de septiembre, de los 43 estudiantes, probablemente  ejecutados por narcotraficantes, en Iguala (Guerrero, sur), provocó una gran  conmoción en todo el país y una ola de protestas ciudadanas, algunas de las  cuales degeneraron en violencia, para exigir que se aclare el caso.

MÁS DE 80.000 MUERTOS DESDE 2006

Otro caso reciente, el de los asesinatos en Tlatlaya (centro) -en el que  tres militares están acusados de asesinar a sangre fría a al menos ocho presuntos delincuentes- apunta también a la presunta relación entre policía, ejército y  narcotraficantes que denuncian las asociaciones de derechos humanos.

"Podemos asegurar que se hará justicia en ese caso", dijo Gómez Robledo, y  aseguró que el mexicano "es un ejército de 250.000 hombres por lo que no puede  juzgarse a la institución por los hechos de un número de elementos, aunque haya  elementos de cierto nivel jerárquico". 

Más de 80.000 personas han sido asesinadas en México y otras 22.000 han  desaparecido desde 2006 cuando el ex presidente Felipe Calderón lanzó una  ofensiva militar contra los cárteles del narcotráfico. La gran mayoría de esos  crímenes están impunes.

A pesar de ello el responsable mexicano defendió la gestión del gobierno de Peña Nieto y aseguró que, en el último año y medio, la media nacional de  homicidios ha bajado de 22,5 a 19 homicidios por cada 100.000 habitantes,  aunque reconoció las disparidades entre los estados.