En el partido que cerró el Grupo C de la Copa América Centenario se enfrentaron México y uruguay, en un duro partido que se fua acalorando con el paso del tiempo, gracias a los goles y expulsiones ocurridas en el duelo.
Así, el ambientes se fue condicionando en el University of Phoenix Stadium, llegando hasta las butacas. Como en la mayoría de los campeonatos internacionales, no hay un sector definido para hinchas de una u otra selección. Esto ayudó para que barristas de México y Uruguay se enfrentaran.
Tras el empate marcado por Diego Godín, la fanaticada celeste celebraron con todo, enrostrando el resultado. Esta situación causó que parte de la hinchada mexicana reaccionara y comenzaran a discutir, aunque con el paso del tiempo comenzaron a lanzar algunos objetos.
Pese a que la policía llegó para frenar los incidentes, estos siguieron produciéndose hasta el final del partido.