Michael Bublé sería el anfitrión de la 37° edición de los Brit Awards, cuya ceremonia de realizará el 22 de febrero.
No obstante, casi un mes antes de los premios, el cantante anunció su retiro de esa labor. Según afirmó el sitio NME, la decisión se debe a la dura batalla contra el cáncer de hígado que enfrenta su hijo Noah, de tres años: una triste noticia que el propio artista difundió en noviembre pasado.
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Por entonces, el músico y su esposa, la modelo y diseñadora argentina Luisana Lopilato, difundieron un sentido mensaje para revelar la información. "Estamos devastados por el reciente diagnóstico de cáncer de nuestro hijo mayor Noah, quien se encuentra actualmente en tratamiento en los Estados Unidos", declaró la familia. "Luisana y yo vamos a dedicarle todo nuestro tiempo y atención a ayudar a Noah a ponerse mejor", agregó el escrito. Aún así, el intérprete de It's A Beautiful Day aceptó conducir la ceremonia de los premios musicales, aunque ahora debió echar pie atrás.
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El pasado fin de semana se dieron a conocer los nominados a la nueva versión de los premios, donde destacó la presencia de David Bowie, quien a un año de su fallecimiento, competirá en las categorías a mejor artista masculino y mejor álbum por su último trabajo, Blackstar.
Otro artista que podría recibir un trofeo de manera póstuma es el canadiense Leonard Cohen, también fallecido en 2016, nominado a mejor artista masculino internacional.
La ceremonia de los premios se realizará el 22 de febrero en el O2 Arena de Londres y contará con las actuaciones de 1975 , Emeli Sandé y Little Mix, entre otros.
