Si hay que seleccionar una tendencia que define al elenco del mundo de Breaking bad, es la presencia de actores cómicos en papeles profundamente oscuros. Bryan Cranston era conocido por la comedia Malcolm antes de encarnar al traficante Walter White, y Bob Odenkirk tiene incluso en su currículo el haber sido escritor de Saturday night live antes de transformarse en el abogado Saul Goodman, el protagonista de Better Call Saul.

En esta última serie, uno de los personajes centrales en la trama es Chuck, el hermano mayor de Jimmy McGill, verdadero nombre de Goodman, interpretado por Michael McKean. El actor es recordado como el "vocalista" de la banda ficticia Spinal Tap, en el icónico documental satírico This is Spinal Tap (1984). Pero el personaje del actor en esta serie se aleja bastante del terreno cómico, fuera de algunas notorias excentricidades.

Chuck es un experimentado abogado que dejó su carrera hace un año, luego de ser afectado por una extraña condición, hipersensibilidad electromagnética, que lo mantiene recluido en su casa sin poder estar en contacto con la mayoría de los aparatos eléctricos. Claro, la rareza de su enfermedad lleva a una pregunta obvia: ¿es algo real o está todo en su cabeza? "La verdad ni yo estoy muy seguro de la verdad absoluta detrás de su condición. Sólo sé que tengo que interpretarlo como si yo creyera que fuera real, porque Chuck está convencido que es así. Cuando una persona sufre una enfermedad cuya fuente está sólo en su cabeza, igual va a sentir los efectos como si existieran en un cien por ciento", dice McKean al teléfono, agregando, "no sé si es posible determinar si su condición es totalmente sicológica o si es absolutamente real".

Todo en familia

La relación entre ambos hermanos juega un rol importante en el desarrollo del personaje central, que todavía no parece estar cerca de asociarse con traficantes de metanfetaminas como se le vio en Breaking bad. Pero sí posee un hambre de poder y una presión por llegar a tener el prestigio de su hermano mayor, al que ahora debe cuidar en su "enfermedad". "Yo creo que en los siguientes capítulos se cuestionará qué tan positiva ha sido la influencia de Chuck sobre Jimmy, porque mucho del accionar negativo de este último se explica en su relación con el primero. Muchas veces se espera que el hermano mayor exitoso sea un mentor para el menor, pero no siempre esa dinámica tiene efectos positivos", explica McKean. "La envidia de Jimmy hacia Chuck es lo que lo mantiene sus acciones al borde de lo ilegal", agrega.

McKean presenta la particularidad de ya haber trabajado con varios de los nombres involucrados a Breaking bad y Better call Saul. Compartió junto al creador de ambas series, Vince Gilligan, cuando este escribía los guiones de Los expedientes secretos X; coincidió brevemente con Bob Odenkirk en Saturday night live; y actuó en Broadway junto a Brian Cranston en 2014. "Apenas conocí a Vince me di cuenta que era en un tipo extremadamente trabajador. El tipo realmente disfruta creando estos personajes muy atípicos, que parecieran fuera de su ambiente. Viven vidas muy distintas a la de uno. Y me encanta trabajar así", explica el actor.

Respecto a su pasado cómico, McKean no ve diferencias respecto a su nueva labor. "Siempre interpreto los personajes con el mismo profesionalismo, sin importar el género. Los guionistas son los que dan el tono, agregando las bromas al libreto si se trata de una comedia, y yo sólo interpreto eso, y ayudo de la mejor manera. Con este personaje simplemente hago lo que siempre he hecho, que es mi trabajo. Creo que incluso verán momentos graciosos, pero claramente no es lo que prima en este rol", concluye el actor.

Better call Saul estrena nuevos episodios todos los martes a través de Netflix.