El líder independentista vasco Arnaldo Otegi aseguró al diario estadounidense The Wall Street Journal que el grupo armado ETA está dispuesto a abandonar la violencia y a seguir una estrategia pacífica para crear un Estado vasco indenpendiente, según publicó hoy el diario estadounidense.
En respuesta a un cuestionario enviado por el periódico, Otegi afirma desde la cárcel que ETA rechaza ahora "cualquier violencia que busque conseguir objetivos políticos".
Sin embargo, el vicepresidente primero del gobierno y ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, consideró hoy que la declaración de intenciones no es novedosa y supone "una estrategia de propaganda", dijo en una entrevista a Radio Euskadi. "Décadas de hechos tremendos y asesinatos" no pueden acabar con "dos o tres declaraciones", señaló, mostrando su escepticismo sobre la voluntad verdadera de ETA dejar las armas.
Rubalcaba recordó la violación de ETA de la última tregua rota por la banda con un atentado a la terminal 4 de Barajas en diciembre de 2006 que dejó dos muertos. Desde entonces, señaló, la palabra tregua "no vale nada" y no se puede dialogar con la banda. Además, criticó el papel que desempeñan los mediadores internacionales, asegurando que el gobierno español no los necesita.
Otegi, que fue portavoz de la ilegalizada Batasuna y miembro de ETA, cumple desde marzo pasado una condena de dos años de prisión por enaltecimiento del terrorismo. En octubre, desde la cárcel, en respuesta a un cuestionario enviado por el diario español "El País", Otegui señalaba también que la organización no es compatible "en la estrategia independentista el recurso a la violencia armada. Esa es una de las conclusiones a la que hemos llegado y la expresamos sin ambigüedades".
Según explica hoy "The Wall Street Journal", el separatista "no llegó a confirmar que ETA se esté preparando para anunciar un fin de su campaña de 42 años de violencia". Sin embargo, sí habría insinuado que "próximos acontecimientos" no especificados aumentarán la presión sobre el gobierno español para negociar un fin del conflicto vasco.
El pasado 5 de septiembre el grupo armado declaró un alto el fuego que el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, calificó de "profundamente decepcionante. Sólo una decisión vale. Se dice con pocas palabras: abandono de las armas para siempre".