Unos 25 mil venezolanos cruzaron hoy la frontera con Colombia, que fueron abierta por doce horas por el Gobierno del país vecino para que sus ciudadanos puedan pasar a la ciudad de Cúcuta a comprar alimentos y medicinas.
Desde las 5.00 hora local de este domingo la multitud atravesó el puente internacional Simón Bolívar, que comunica la ciudad venezolana de San Antonio del Táchira con Cúcuta, capital del departamento del Norte de Santander, con el fin de abastecerse ante la escasez que se vive en el país vecino.
"Somos de aquí de San Antonio, de verdad no tenemos nada de comida para darle a nuestros hijos, entonces no me parece justo que la frontera todavía siga cerrada", dijo a Efe en Cúcuta una mujer que acaba de pasar el puente junto con su esposo y dos hijos, de cinco y dos años de edad, y que prefirió no dar su nombre.
El gobernador del Táchira, José Gregorio Vielma Mora, anunció ayer que la frontera sería abierta este domingo por orden de Maduro, pues "se ha planificado un segundo ingreso de venezolanos a Colombia organizados por la derecha venezolana, con el pretexto de comprar comida y medicamentos".
El comentario fue una aparente referencia a la situación que se presentó el pasado martes, cuando unas 500 venezolanas procedentes de la ciudad de Ureña atravesaron el cerrado paso fronterizo por el puente internacional Francisco de Paula Santander y llegaron a Cúcuta para comprar alimentos ante la escasez que se vive en su país.
Con este anuncio, desde la madrugada de hoy, centenares de venezolanos hicieron fila en el puente Simón Bolívar para pasar al lado colombiano.
El pasado miércoles, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, visito Cúcuta junto con su canciller, María Ángela Holguín, y anunció que buscará dialogar con Maduro con el fin de conseguir la reapertura de los pasos fronterizos.
Los pasos entre el estado Táchira y Norte de Santander fueron cerrados el 19 de agosto del año pasado por orden del presidente venezolano, Nicolás Maduro, como parte de una campaña contra el contrabando y supuestos paramilitares, medida que luego extendió a todos los cruces entre los dos países, que comparten una frontera terrestre de 2.219 kilómetros.